“El Absurdo de los Independientes”
L a tranquilidad.
Atanasio: ¿Sabían que 86 personas pretenden contender por la Presidencia de la República como candidatos independientes?
Josefina: Ellos me recuerdan a los muchos pollitos de nuestra granja.
Gaspar: Lo recuerdo. Corrían y aleteaban, sin despegar el piso, al caer el maíz. La paz. Atanasio: ¿Conocían que cada uno de los 86, necesita para ser candidato oficial, obtener 866 mil 593 firmas distribuidas en 17 entidades federativas en un período de 120 días naturales?
Josefina: Felices andaban los pollitos por el gallinero.
Gaspar: ¿Te acuerdas como se picoteaban entre sí? Ja ja ja. La excitación. Atanasio: ¿De dónde obtendrán el dinero para conseguir las firmas? ¿Cómo pagarán un equipo distribuido en 17 estados de la República para sacar 7 mil 221 firmas diarias cada uno? ¿Será posible fiscalizar esos recursos?
Josefina: De niña, yo escuchaba a las gallinas cantarles a sus pollitos por la noche: “El cielo se va caer y el Rey lo debe saber. ¿Dónde está mi pollito que lo quiero esconder?”.
Gaspar: Yo me dormía con esa canción también. El allegro. Atanasio: Si multiplico 86, número de candidatos, por las 866 mil 593 firmas exigidas, obtengo 74 millones 526 mil 998 electores. Si la lista nominal es de 85 millones 953 mil 712, entonces, la diferencia entre signaturas y electores es de 11 millones 426 mil 714. ¡Maravilloso! Los independientes penetrarán a bayoneta calada las huestes del voto duro de los partidos políticos para lograr su objetivo. ¡Bravísimo! ¡Dejarán migajas a esos partidos malignos!
Josefina: Cuando me levantaba por la mañana, rápido iba a darles de comer a los pollitos.
Gaspar: Te veía desde la ventana. Me emocionaba mirarlos felices. La catástrofe. Atanasio: De los 86, al final sobrevivirán no más de 6 para enfrentar dos duras realidades; el número de firmas rara vez coincide con el número de votos obtenidos el día de la elección; y la fragmentación de sus votos favorecerá al PRI.
Josefina (llora): ¡Te acuerdas cuando el coyote se comió a casi todos los pollitos! ¡Buaaa!
Gaspar (solloza): Sí. Sob, sob.