Milenio Laguna

Wells Fargo cerrará hasta 900 sucursales

El banco asume esa decisión a pesar de que la reforma fiscal de Trump le reportará 3.4 mil mdd por el recorte de impuestos

- Nueva York

Alistair Gray/ Wells Fargo planea cerrar alrededor de 900 sucursales como parte de sus esfuerzos para reducir los costos a raíz de su escándalo de venta abusiva, a pesar de que las utilidades del banco recibieron un impulso inmediato de 3 mil 400 millones de dólares por la reducción de la tasa de impuestos corporativ­os de Estados Unidos.

Ejecutivos del grupo con sede en San Francisco, que opera alrededor de 5 mil 860 sucursales en todo el país, dijeron el viernes que los cierres de la red minorista se harán en los próximos cuatro años.

La revelación se produjo a pesar de que Wells será uno de los mayores beneficiad­os por los recortes de impuestos entre los bancos más grandes del país, y el mes pasado dijo que aumentará el salario mínimo del personal y otorgará acciones restringid­as a 250 mil empleados.

La reforma fiscal se promulgó en ley hace apenas tres semanas, pero el viernes Wells registró una reducción multimillo­naria en el valor de los “pasivos por impuestos Compromiso de disminuir 4 mil millones de dólares anuales en costos hacia finales de 2019. diferidos” (gravámenes a pagar en el futuro) en su balance.

Sin embargo, los inversioni­stas vieron más allá de las ganancias contables para concentrar­se en la suerte del negocio subyacente, que todavía batalla para salir del escándalo de las cuentas falsas que estalló hace 18 meses.

El viernes, el banco recibió un golpe de 3 mil 250 millones de dólares en sus ganancias por cargos para pagar litigios por investiga- ciones regulatori­as vinculadas con hipotecas, prácticas de ventas y “otras cuestiones relacionad­as con el consumidor”. “Todavía no salen de los problemas, los asuntos regulatori­os y legales aún no se resuelven”, dijo Kyle Sanders, analista de Edward Jones, quien describió las ganancias como “mediocres”.

Como parte de los esfuerzos para su recuperaci­ón, los ejecutivos se comprometi­eron a recortar 4 mil millones de dólares al año en costos hacia finales de 2019. A diferencia de sus rivales, Wells se resistió durante mucho tiempo a emprender un programa agresivo de cierre de sucursales. Pero comenzó las reduccione­s bajo la gestión de Tim Sloan, a quien nombraron director ejecutivo el año pasado a raíz del escándalo.

Wells dijo que planea reinvertir los ahorros en parte para el fortalecim­iento del cumplimien­to

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CHUCK BURTON/AP

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