Gobierno de Maduro quiere unir comicios
El líder oficialista Diosdado Cabello plantea adelantar las elecciones legislativas y juntarlas en abril con las presidenciales, pese al rechazo
Un poderoso líder chavista planteó adelantar las elecciones parlamentarias en Venezuela para celebrarlas junto a las presidenciales el 22 de abril, acorralando aún más a una oposición que apuesta a boicotear los comicios en los que el presidente Nicolás Maduro buscará la reelección.
El as bajo la manga lo sacó ayer el dirigente Diosdado Cabello, vicepresidente del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), un día antes de que la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) anuncie formalmente que se margina de las presidenciales por considerar que no hay garantías para una contienda “democrática”. “No lo veo como una idea solo (de estrategia política), sino de interés nacional”, dijo a la televisora oficial Cabello y señaló que el Parlamento, único poder que controla la MUD, “no hace nada”. El dirigente planteará la solicitud a la oficialista Asamblea Constituyente, que rige el país como un suprapoder y que hasta ahora ha aprobado todas sus decisiones -las más radicales a cargo de Cabellode forma unánime.
La Constituyente, desconocida por la oposición y varios gobiernos, ya había adelantado las presidenciales, inicialmente previstas en diciembre. Su presidenta, Delcy Rodríguez, dijo que se trabaja en una “propuesta de ley” para todos los poderes, incluido el Legislativo. “Están viendo la posibilidad de echarle el guante a todos los poderes de una vez aprovechando que no hay oposición, que la MUD no va a participar, y quieren arrasar con todo”, opinó el politólogo Luis Salamanca.
El gobierno sostiene que el sector mayoritario de la MUD no participará en los comicios por orden de Estados Unidos, que busca derrocarlo mediante un golpe de Estado y una invasión militar apoyada por la “derecha venezolana”.
Según analistas, con el adelanto de elecciones, el oficialismo busca aprovechar las fracturas en la oposición para perpetuar en el poder a Maduro, de 55 años, y desde 2013 en el puesto, pese a la debacle económica con hiperinflación, falta de alimentos y de medicinas.
A cuatro días de la inscripción de candidatos, la MUD no ha dicho qué hará ante las presidenciales, tras dos semanas de discusiones internas. Pero tres de sus mayores partidos, Voluntad Popular, de Leopoldo López; Primero Justicia, del ex candidato Henrique Capriles, y Un Nuevo Tiempo rechazaron participar, buscando restarle legitimidad a una reelección de Maduro. “La van a barrer y va a quedar muy mal, sin poder institucional —aunque no lo ejerza—, sin la cuota que tiene en el Parlamento y a la deriva, fragmentada en todas sus partes, y con una decisión de no participar que tomaron con una lentitud pasmosa y sin visión unitaria”, vislumbró Salamanca sobre la alianza opositora.
Fuentes de la MUD dijeron a la agencia AFP que la mayoría de la veintena de partidos que la conforman se marginarán de la votación, pero Henri Falcón, disidente chavista y potencial candidato, sostiene que “la salida tiene que ser (...) electoral”.
El analista Diego-Moya Ocampos, del IHS Markit (con sede el Londres), calificó la propuesta de Cabello como un “chantaje” del oficialismo ante una oposición que habría decidido no “prestarse para legitimar una elección presidencial que carece de las mínimas garantías y que (parte de) la comunidad internacional no reconocerá”.
Sin embargo, dirigentes opositores como Simón Calzadilla dicen estar de acuerdo con una elección simultánea siempre que se realice al menos el 30 de junio y con condiciones básicas.
La opositora MUD (centro-derecha) arrasó en las legislativas de diciembre de 2015, pero apenas asumió el control del Congreso el poder judicial, acusado de servir al gobierno, lo declaró en desacato y nulas todas sus decisiones.
Maduro busca evitar también la presión internacional, pero la ex fiscal de Venezuela Luisa Ortega, refugiada en Colombia, pidió el lunes a lo que llamó el “legítimo” Tribunal Supremo de Justicia de su país, que ordene la captura internacional de Maduro por corrupción en el marco del caso Odebrecht.
Ortega, destituida en 2017 por el gobierno, ofreció una conferencia de prensa desde Colombia para afirmar que cuenta con las pruebas necesarias para presentar un “antejuicio de mérito” contra Maduro por los delitos de “corrupción propia y legitimación de capitales”.