Masiva protesta desafía a Macri
Sindicatos rechazan “políticas de hambre”
Preparémonos los trabajadores, cuando llegué el momento de expresar la voluntad democrática. Los gorilas no pueden estar más en la conducción del país porque nos quieren quitar la dignidad a los hombres de trabajo y no lo podemos permitir.” Con esta frase el histórico líder camionero Hugo Moyano cerró la masiva y transversal movilización de sindicatos y organizaciones sociales que colmó la céntrica Avenida 9 de Julio, en Buenos Aires, contra las políticas de ajuste del gobierno de Mauricio Macri (centro-derecha).
Los gremios más afectados por los despidos, cierres de fuentes de trabajo, alzas desmesuradas en alimentos y servicios colmaron la que se ha dado en llamar “la avenida más ancha del mundo”.
Las críticas a las políticas económicas —que Moyano calificó “de hambre”— fueron el eje de los discursos de las distintas centrales sindicales que precedieron al titular del gremio de Camioneros, ex aliado de Macri.
Moyano destacó la amplia convocatoria de “distintos sectores políticos e ideológicos” para el denominado 21-F, que se leía impreso sobre una bandera argentina en el palco de los oradores, y aseguró que las 400 mil personas presentes tuvieron “un solo objetivo: decirle al gobierno, al señor presidente, que no siga llevando políticas que hambrean a la parte más sensible de nuestra sociedad”.
A la protesta se adhirieron las seis entidades que nuclean a pequeños y medianos empresarios, afectados por las alzas en las tarifas de los servicios, la apertura de las importaciones, la inflación y la recesión derivadas de las políticas
Hugo Moyano, líder camionero, declara la “guerra” al gobierno de centro-derecha Los macristas quieren encarcelarlo; imputan cargos de “corrupción” y enriquecimiento ilícito
de la coalición oficial Cambiemos.
Cuando Macri era alcalde de Buenos Aires, Moyano pactaba todo con él y juntos peleaban contra la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Cuando Macri llegó a la Casa Rosada, Moyano fue una de las primeras personas a las que recibió. Ahora la guerra es total, aunque el todopoderoso sindicalista ha logrado sobrevivir a seis presidentes.
Los macristas quieren encarcelar a Moyano por enriquecimiento ilícito, pero el líder camionero sube la apuesta: “Si voy preso, que sea en la celda de al lado del padre de Macri”, dice en alusión al próspero empresario de origen italiano. “Creo que les queda poco tiempo. La gente está convencida de que este gobierno está fracasando y no tiene respuestas”, aseguró.
Moyano incluso parece dispuesto a aliarse con la hoy senadora Cristina K., su eterna enemiga. Y es que el movimiento peronista, al cual ambos adhieren, no hay “enemigos irreconciliables” sino alianzas tan pasajeras como las rivalidades.
La manifestación de ayer puede ser solo la primera escaramuza de una guerra, ahora entre Macri y Moyano.