Proyectan la cinta Tepeyac con banda sonora integrada
La historia aborda el mito sobre la aparición de la Virgen de Guadalupe y se exhibirá hoy en la FIL del Palacio de Minería
El estandarte de la Virgen de Guadalupe que utilizó el cura Hidalgo, en el inicio del movimiento independentista, se puede ver en el largometraje centenario Tepeyac (1917), de Carlos E. González, José Manuel Ramos y Fernando Sáyago, que ha sido restaurado digitalmente por la Filmoteca de la UNAM. El filme se proyectará hoy, por primera vez con la banda sonora integrada (hasta 1932 el cine en México fue “mudo”), en la 39 Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería.
La cinta, que aborda las apariciones de la Virgen de Guadalupe en el cerro del Tepeyac, se podrá apreciar a las 17:00 en el auditorio Bernardo Quintana, con la presencia del cineasta Albino Álvarez, subdirector de Rescate y Restauración de la Filmoteca de la UNAM; de José María Serralde, director del Ensamble Cine Mudo, y de Daniel Hidalgo, de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas, quienes hablarán del trabajo de restauración y la creación de la música.
Para contar la historia se recurrió a LafiestadeGuadalupe, obra de Ignacio Manuel Altamirano, de donde se tomaron citas textuales como parte de los intertítulos.
Álvarez dice que Tepeyac se rodó justo en el año en que se promulgó la Constitución de 1917, documento que plantea la educación laica. “Es una película realizada con el mayor anhelo por una compañía a la que, por desgracia, no le fue muy bien, ya que sus directores no tenían una formación como cineastas, pero veían en el medio una oportunidad de negocio, por lo que se propusieron rescatar las mejores leyendas y tradiciones de nuestro país”.
Tepeyac, subraya, es un documento valioso desde el punto de vista estético e histórico porque, al final, se percibe una procesión donde llevan un estandarte de la Virgen de Guadalupe, el mismo que utilizó Hidalgo durante el inicio del movimiento insurgente.
Recuperación
El subdirector de Rescate y Restauración de la Filmoteca de la UNAM refiere que la cinta, que era una copia positiva de exhibición, fue restaurada con la colaboración de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas en 2016, como parte del esfuerzo por preservar la memoria fílmica. “Ellos nos apoyaron con fondos para trabajar durante 12 meses en la restauración del filme. En promedio, entre el personal del taller y el del laboratorio de rescate de la Filmoteca intervenimos unas 20 personas”.
Explica que el soporte original de la película estaba en mal estado, ya que presentaba manchas debidas a la base y la emulsión, además de pegaduras evidentes y variaciones de luz intensa.
Álvarez añade: “La película tenía rayones muy fuertes y muy complicados de eliminar, así como manchas negras y blancas que implican pérdidas de imagen y de información en los fotogramas. Hay una parte artesanal que se hizo sobre éstos y se repararon las roturas”.
Pero el proceso de recuperación fue muy arduo: en primer lugar se estabilizó la cinta, cuyo soporte era de nitrato de celulosa de un duplicado positivo, y se restauraron 49 mil 110 fotogramas, que se limpiaron manualmente y a los que se les hizo una corrección de color.
Para esta proyección en el Palacio de Minería, José María Serralde, director del Ensamble de Cine Mudo, realizó al piano una nueva versión de la música porque, en su opinión, resulta más efectiva en términos cinematográficos y narrativos.