SEMARNAT regula el proyecto de gasoducto en Sierra del Sarnoso
Aprobación se otorgó en base al Programa de Ordenamiento Ecológico y Territorial
EIsis Rábago/ n materia ambiental quien regula el tema de construcción del gasoducto en el área de la Sierra del Sarnoso que se desarrolla actualmente es la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) por la competencia que tienen, esto con apoyo de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales del Estado y del municipio, informó el titular de Medio Ambiente y Ecología de Lerdo, Abel Ramos Martínez. “Creo que la mayoría de la gente sabe que es un proyecto que viene El proyecto viene de administraciones pasadas. no de esta administración, sino de otras anteriores, no es un proyecto que autorice el ayuntamiento, el cual aún no concluye”, enfatizó.
Aunque destacó que las obras de introducción del gasoducto tiene el aval de los tres órdenes de gobierno en base al Programa de Ordenamiento Ecológico y Territorial, de acuerdo con Ramos Martínez es el gobierno federal a través de la SEMARNAT quien se encarga de vigilar la obra y notificar al municipio en cuanto haya irregularidades.
Mencionó que la aprobación se otorgó en base al cumplimiento del Programa de Ordenamiento Eco- lógico y Territorial, que representa el instrumento jurídico para que las empresas que tienen proyectos de esa naturaleza no afecten las zonas que están catalogadas como importantes en materia ecológica.
Lo anterior debido a que tiene ciertas partes de aprovechamiento, pues si bien aunque fuera declarada como Área Natural Protegida (ANP) tiene las posibilidades de aprovechamiento.
Destacó que aunque la vigilancia corre a cargo de la SEMARNAT al momento en que inició el proyecto tanto el Gobienro Estatal como Municipal analizaron el Programa de Ordenamiento Ecológico para indicar la directriz por donde debería pasar el gasoducto.
Si bien recordó que en la administración pasada se presentó el caso que dentro de la planeación que tenía la empresa iba a afectar una parte que no se debería afectar, se redireccionó el proyecto en la Unidad de Gestión Ambiental (UGA) por donde iba a pasar para cambiar a otra que era de aprovechamiento y con esto no lastimar ningún ecosistema.