En Matamoros querían construir una iglesia nueva
El padre Juan Alonso Rodríguez invitó al Obispo de Saltillo para que viniera a poner la primera piedra
Murió en Torreón el reverendo Robert C. Elliot, decano de los misioneros Metodistas, víctima de una violenta hemorragia cerebral. Y no es que no se le hubiera brindado ayuda, el hombre fue atendido por uno de los mejores médicos locales pero no pudo salvarle la vida.
A propósito del tema religioso, en Matamoros querían construir una iglesia nueva y el padre Juan Alonso Rodríguez invitó al Obispo de Saltillo para que viniera a poner la primera piedra, por ahí del día veinte. Quién sabe, igual Monseñor le sabía mover a la cuchara de albañil.
Iban muy bien las colectas para ayudar a los damnificados de Veracruz. Las Cámaras de Comercio, Agrícola y de Propietarios designaron ocho comitivas que iban a recorrer a la población pudiente de las ciudades laguneras, para que aflojaran algo. Un día antes juntaron alrededor de seis mil respetables pesos.
Los equipos de fútbol España y Nacional anunciaron la Copa Caridad, con tres juegos en los que las ganancias totales se iban a ir directamente para la población veracruzana. Al parecer todos los clubes ibéricos en México tuvieron actividades para reunir fondos.
Para la economía nacional, se expidió un decreto que autorizaba la emisión de vales de a peso y de tostón, y que no deberían rebasar en conjunto los 25 millones de pesos. Todavía no había fecha para que salieran a la luz esos vales, pero menos aún se tenía fecha de entrega de las monedas que iban a acuñarse.
Y si aquí estaba haciendo frío, en algunos estados del norte como Chihuahua hasta estaba nevando. Pero donde estaba más feo el invierno era en Rusia, y eso que ellos aguantan vara; los muertos se contaban por millares, y es que había millares sin casa, o sin elementos disponibles para poder sobrevivir, como comida o abrigo.
La comunicación con Alemania estaba interrumpida por causa de fuertes tempestades, pero en tanto los rumores de que el gobierno del presidente Ebert había sido derrocado por los comunistas eran más fuertes. Pero no se podía confirmar nada.
El jefe del partido socialista sueco, Mr. Branting hizo declaraciones respecto al socialismo, sobre Marx y sus virulentos textos (que fueron tan violentamente mal interpretados que causaron males terribles en todo el planeta), y de que seguramente eso no iba a durar por que traería tan solo miseria. Atinó en lo segundo. En lo primero se equivocó por varios años.
Y aunque ya sabíamos que los gringos no nos querían, se les invitó a venir a visitarnos, pero nada más a comerciantes para mostrarles las grandes virtudes y materiales que teníamos en venta y que se podían llevar a precio de ganga, como siempre.