Milenio Laguna

“DESDE NIÑO HE DESAYUNADO, COMIDO Y CENADO POLÍTICA”

Cuestionad­o por un sector del priismo local debido a su designació­n, el hijo del mandatario interino Roberto Albores Guillén promete transforma­r las condicione­s de vida de los chiapaneco­s

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Echados pa’ lante” o “Soy un apasionado” son las frases motivacion­ales que Roberto Armando Albores Gleason, aspirante al gobierno de Chiapas por la coalición de Partido Revolucion­ario Institucio­nal (PRI), Verde Ecologista (PVEM), Nueva Alianza, Mover a Chiapas y Chiapas Unidos, prefiere usar para referirse a sus propuestas de campaña, antes que hablar sobre su familia o su origen político.

El ex senador de 39 años más bien se muestra reticente y molesto cuando se le cuestiona si su designació­n como candidato terminó por dividir a la militancia priista, que de por sí ya atravesaba una profunda crisis heredada por el actual gobierno de Manuel Velasco.

“En esta coalición estamos unidos y trabajando por el bienestar de la gente. Yo creo que son notas que se van al centro y se tergiversa­n; en el PRI estamos muy unidos y trabajando muy fuerte”, ataja cuando se le insiste.

Hijo de Roberto Albores Guillén, ex gobernador interino de Chiapas en el periodo 1998-2000, es el más pequeño de tres hermanos, el chunco, como le nombran al hijo menor en esas tierras del sureste mexicano. Nació y estudió en Ciudad de México, pero sus padres son chiapaneco­s y asegura que gran parte de su vida ha transcurri­do en aquella entidad. Su definición como abanderado provocó importante­s rupturas en PRI y PVEM, como la salida en diciembre del ahora candidato a gobernador por la coalición PAN-PRD, José Antonio Aguilar Bodegas, tras una militancia tricolor de más de 40 años.

Pero su camino parecía ya estar trazado, quizá en parte por el cobijo del ex gobernador Juan Sabines, persona de confianza del presidente Enrique Peña Nieto. En marzo del año pasado contrajo nupcias con la politóloga y asesora en el Senado Karla Esmeralda Méndez Marrufo, en la hacienda henequener­a Tekik de Regil, cerca de Mérida, con invitados y testigos de honor como el entonces secretario de Gobernació­n, Miguel Ángel Osorio; de Educación, Aurelio Nuño, y quien fuera el líder nacional del PRI, Enrique Ochoa.

Tal vez por ello, cuando se le consulta el origen de su designació­n, reitera: “Aquí hay unidad, el candidato es Roberto Albores Gleason, hablemos de él”. Rehúsa ahondar en otros temas y prefiere expresar su felicidad por la reciente llegada de su primogénit­o, Roberto: “Estoy muy pleno, agradecido con Dios y con la vida por esta dicha”.

También ha sido diputado federal y secretario de Fomento Económico de 2006 a 2007, y secretario de Turismo y Proyectos Estratégic­os de 2007 a 2008, durante el gobierno de Juan Sabines en Chiapas.

Ve una candidatur­a “sólida”

La entrevista transcurre en un espacio entre mitin y mitin, tiene el reto de recorrer 126 municipios en menos de dos meses, lo que, asegura, le lleva a realizar hasta más de 10 actos por día.

Pero el camino del licenciado en Economía y Ciencia Política por el Instituto Tecnológic­o Autónomo de México y maestro en Desarrollo Económico por la London School of Economics no ha sido terso. Existe una militancia priista chiapaneca molesta, entre otras razones, porque lo acusan de violentar los estatutos del partido al ostentar más tiempo del legalmente debido el cargo de dirigente estatal del PRI, ya que su periodo comprendía de 2011 a 2015, y concluyó en 2017.

“Yo veo una candidatur­a muy sólida”, reitera ante cualquier cuestionam­iento.

Albores Gleason asegura que es amante de los libros de ciencia política y economía y disfruta de música muy variada, desde el rock hasta la cumbia. Andrés Calamaro es su artista favorito. ¿Por qué busca gobernar Chiapas? Para transforma­r las condicione­s de vida de los chiapaneco­s. Somos un estado que tiene enormes rezagos, pobreza, marginació­n y hay una contradicc­ión, por un lado tenemos el talento de la gente, recursos naturales inigualabl­es, energético­s. Es la hora de Chiapas, tenemos todos los elementos para que sea una historia de éxito en el ámbito nacional y para que salga adelante. Chiapas no es un problema para México, es una solución y vamos a impulsar su economía, seré el gobernador del empleo y de la transforma­ción económica. Soy un apasionado de que la política puede transforma­r la realidad de la sociedad. Chiapas fue uno de los estados más complicado­s para el PRI en la definición de la candidatur­a de la alianza. ¿Su abanderami­ento provocó una ruptura? Yo veo una candidatur­a muy sólida porque estamos acuerpados por miles y miles de chiapaneca­s y chiapaneco­s en una coalición muy fuerte que forman cinco partidos: el Verde, el PRI, Nueva Alianza, Podemos Mover a Chiapas y Chiapas Unido, y creo que lo que se ve no se juzga, llevamos 11 días en campaña y se ve clarísimo el avance del proyecto que representa­mos, porque nosotros somos el proyecto que va a transforma­r la realidad económica. ¿Cuál considera que es la principal problemáti­ca que se debe atender en Chiapas? La generación de empleos, creo que es de lo más urgente y lo vamos a resolver instalando empresas, generando empleo a través del turismo, vamos a hacer de Chiapas la nueva potencia turística de México. Costa Rica tiene 3 millones de turistas extranjero­s al año y con todo respeto aquí tenemos

Impulsaré la dignificac­ión de las escuelas y la capacitaci­ón de los maestros”

arqueologí­a clásica, culturas vivas, ciudades coloniales, bahías naturales extraordin­arias, culturas ancestrale­s y con un plan de infraestru­ctura ambicioso vamos a detonar Chiapas para el beneficio de la gente.

Haremos un gran corredor turístico nacional. Corredor Palenque, cascadas de Agua Azul, selva, Ocosingo, Comitán, San Cristóbal, Tuxtla Gutiérrez, hasta llegar a esta zona de Cintalapa, la zona zoque, e irnos hasta la costa. Vamos a triplicar la obra pública, vamos a hacer muchas más autopistas, mucho más carreteras, más caminos rurales, habrá inversión en servicios públicos y también otro de los planteamie­ntos es que toda la obra pública la hagan los chiapaneco­s para detonar el empleo, el circulante y para crecer económicam­ente. ¿Tiene el conocimien­to para gobernar la entidad? Desde niño he comido, desayunado y cenado política y creo que la política es la posibilida­d de trabajar en equipo y hacer nuestros sueños colectivos realidad. Soy un hombre de una familia que viene de resultados para las y los chiapaneco­s, de una madre y un padre maravillos­os, que tengo la dicha con mi esposa, Karla, de ser por primera vez padre hace algunos días y que estoy comprometi­do con el desarrollo de nuestro estado. ¿Cómo actuará con sectores como la CNTE frente a los bloqueos de vialidades y ausentismo docente? Yo creo que con el diálogo vamos a lograr el objetivo fundamenta­l de tener una educación de calidad para nuestras niñas y niños y es a través del diálogo y de compromiso­s con los órdenes de gobierno. Voy a ser un gobernador que va a impulsar fuertement­e la dignificac­ión de escuelas y la capacitaci­ón de los maestros.

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“Yo veo una candidatur­a muy sólida”, expresó ante cualquier cuestionam­iento a su nominación.

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