Tercer round
El tercer debate se vio envuelto en temas muy importantes: que si los candidatos aparecerían de traje y corbata o de guayabera, tremendo problema; por cierto, el Presidente dijo que le gustaría que el encuentro tuviera la misma atención que el partido Ale
E l día del tercer debate de los candidatos a la Presidencia, la Confederación Patronal de la República Mexicana, que agrupa a parte del empresariado más activo y crítico de Liópez, difundió una encuesta: Liópez 41.7 por ciento, Anaya 21 por ciento, Meade 13.6 por ciento. Si Pitágoras no miente, los candidatos se presentaron al tercer debate con una ventaja de 20 por ciento a favor de Liópez. Así hablarían de la economía, la educación y la salud. Así lo leyó Gil en su revista Proceso.
El tercer debate se vio envuelto en temas muy importantes: que si los candidatos aparecerían de traje y corbata o de guayabera, tremendo problema. Por cierto, el presidente Peña dijo que le gustaría que el tercer debate tuviera la misma atención que el partido Alemania vs. México o la inauguración del Mundial. Si Gil ha entendido algo, cosa improbable, esta comisión declarativa no sabe ni de política ni de futbol.
Una vez más, Gilga se hizo unas bolas espantosas con los tiempos y destiempos, las preguntas y quién las respondería. La economía: un problema. Todos quieren acabar con la corrupción: “moralizar al país”, dice
Liópez; “no subir impuestos”, dice Anaya. Bueno, pues que no se suban los impuestos. Lo nunca visto: en la primera ronda, Liópez y sus caras de malvado, ganaban el debate. Gamés se los jura por Dios que lo mira. El éxito trae triunfo, el triunfo victoria, la victoria sonrisas, las sonrisas presidentes. Oh, sí. Educación Rojo de coraje, Gil consideró una vez más que la presencia de El Bronco en estos debates es la vergüenza de la democracia mexi- cana. En fon. Un saludo al Trife. Liópez dice que “cancelará la reforma educativa porque está dedicada a reprimir a los maestros”. Acaso (gran palabra) Gilga nunca había visto a un Liópez más sereno (serénense), así pasa cuando ocurre y cuando llevas 20 puntos de ventaja.
Meade: “incentivar”, “brechas”, “eficiencia tributaria”, “apuesta definitiva”. El segundo bloque lo ganó Meade, la verdad es que necesitaba ganar algo.
Ciencia y tecnología
Dice El Bronco: “Soy un adicto a la tecnología”. Anjá. Anaya sacó un celular sin pila para demostrar que México debe ser un país conectado, y Liópez nos dijo quién será su secretario de Salud y la directora del Conacyt, si gana. Lo mejor de toda la noche: Facebook Bronco Investigation.
Gil cayó sobre la duela de cedro blanco y risotadas y perdió el sentido. El tercer bloque lo ganó Meade. “Hospitales muy ágiles”, “gestión de recursos”, “centralizar el gasto”. En fon, Meade duerme y Gil bosteza.
Salida
Gil vio a un candidato Anaya, ElJoven
Tarabilla, tocado en la fibra última de su alma por los embates de Peña Nieto. Un candidato perdido con una sonrisa tatuada. No deja de ser vergonzoso que el candidato Anaya esté fuera de batalla por los ataques del gobierno federal. Oh, sí.
Gil vio a un candidato José Antonio Meade capaz de decir mil palabrotas y transmitir datos ciertos y conocimientos que a nadie importan. Oh, sí. A Meade le fue muy bien, logró el tercer lugar. A veces se logran cosas que nadie se había propuesto.
Gil vio a un candidato Liópez tranquilo. Ciertamente, quién se pondría nervioso si lleva 20 puntos de ventaja. Liópez no movió ni un dedo y ganó el debate. ¿Cómo la ven? Resultó verdad: los debates no cambian las intenciones de voto. Así las casas (muletilla patrocinada por Grupo Higa), el Mundial de Futbol empieza en unas horas y como dice el clásico, la suerte está echada. La verdad es que Gamés da por terminado este penoso asunto y se dedicará a ver futbol.
Todo es muy raro, caracho, como diría Louise May Alcott: El debate es masculino; la conversación es femenina.