Crecen condenas a Ortega por violencia
La CIDH, la ONU, HRW y el gobierno de Alemania rechazan agresiones a obispos
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (OACNUDH), el gobierno de Alemania y la organización Human Rights Watch (HRW) condenaron los últimos hechos de violencia en Nicaragua y los ataques de turbas oficialistas contra obispos.
En un comunicado conjunto, la CIDH y la sede regional de la OACNUDH rechazaron “enfáticamente” las agresiones a los miembros de la Iglesia católica, entre ellos el nuncio apostólico en Managua, Waldemar Sommertag, el cardenal Leopoldo Brenes y el obispo auxiliar de Managua, Silvio Báez, el lunes en Diriamba, al sur de Managua.
Alertaron además sobre una “campaña de estigmatización” del gobierno contra los líderes católicos por su labor de protección a la población civil y “su fundamental rol” en la mediación en el diálogo nacional. Ambos organismos recordaron al gobierno del presidente Daniel Ortega que el Estado es responsable de garantizar la seguridad, el derecho a la vida y el ejercicio de los derechos humanos de toda la población.
Los incidentes de Diriamba se dieron cuando una misión de obispos, periodistas y activistas humanitarios fue atacada a golpes y con armas blancas por activistas del gobierno, varios de ellos encapuchados, según constató la prensa y pobladores.
El ataque también fue condenado “enérgicamente” por el gobierno de Alemania en un comunicado.
El ejecutivo de Angela Merkel también llamó a aclarar “rápidamente y de forma extensa” las circunstancias de la muerte de las más de 300 víctimas durante esta crisis, iniciada en abril, y pidió castigo a los responsables.
En tanto, Francisco López, uno de los más cercanos colaboradores de Ortega, renunció como presidente de dos importantes entidades del gobierno, Petróleos de Nicaragua y la Empresa Nicaragüense de Minas, cinco días después de ser sancionado por “corrupción” por el gobierno de Estados Unidos.