BENITO VIVE EN EL ABANDONO Y SIN PAPELES EN DURANGO
Pide limosna sobre un corredor gastronómico recargado en un poste y sobre una cubeta desde hace años
Benito Hernández Carrillo de 110 años de vida pide limosna a las afueras del pasaje, un pequeño corredor gastronómico en el centro de la ciudad de Durango. Durante años, recargado en poste y sobre una cubeta blanca vive de la caridad de la gente porque sus hijos lo abandonaron.
Muestra que la chamarra que porta, los pantalones y los zapatos se los regalaron y ya están en mal estado, pero no cuenta con más posesiones. Es por eso que pide ayuda a las autoridades porque le han dado diferentes direcciones, aunque no puede acudir porque su movilidad es reducida.
Pero el problema no termina ahí, porque los papeles que guardaba en una pequeña bolsa que colgaba se la llevó una persona que le regaló una camisa y un pantalón, y ya no regresó a entregárselo.
Pero uno de los dueños de los negocios donde se ubica para pedir limosna, le dijo que lo trasladaría al módulo de Instituto Nacional Electoral (INE) para que solicitara la renovación de la credencial y pueda realizar algún trámite en caso de ser necesario que tomen en cuenta las autoridades su caso.
Durante las horas que se la pasa sentado, que sigue siendo el mismo lugar desde hace muchos años, solamente gana 40 pesos al día.
El entrevistado comentó que solamente uno de sus hijos ve por él, pero se encuentra en la ciudad de Torreón, Coahuila, por lo que el vive solo en Durango.
Hernández Carrillo dijo que aunque las personas buscan ayudarlo, el principal problema que tiene es que las piernas ya no le responden y por eso se la pasa sentado en el mismo lugar junto al poste.
Para alimentarse, en el pasaje le regalan todos los días una gorda o un lonche, y con ello puede sobrevivir los días, porque sus hijos se encuentran lejos y no reciben ningún tipo de apoyo.
Finalmente dijo que Catalina Mercado que será pronto diputada local es de las pocas personas que lo frecuentan y ayudan en la medida de los posible. Y es que incluso sus amigos ya perdieron la vida y ahora se encuentra solo, sin más esperanzar que la generosidad de la gente.
Solamente uno de mis hijos ve por mi, pero se encuentra en la ciudad de Torreón y de las pocas personas que me frecuentan y ayudan en la medida de lo posible aquí en Durango es Catalina Mercado, quien pronto será diputada local”.