La industria del aluminio cierrafilas con acereros
MPilar Juárez y Reuters/ éxico no debe aceptar la actualización del Tratado de Libre Comercio (TLC) mientras no se resuelva la problemática creada por la aplicación de la medida 232, a partir de la cual se impusieron aranceles de 10 por ciento a las exportaciones de aluminio, manifestó el instituto del ramo.
El miércoles, la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero) también consideró imperativo que el gobierno mexicano defienda a su industria nacional y solicite la exclusión de México de la medida 232 antes de cerrar la negociación del TLC entre los tres países.
El Instituto del Aluminio, que indicó que aceptar la aplicación de la sección 232, contenida en un Acta de Expansión de Comercio de 1962, es equivalente a permitir la violación del espíritu mismo del tratado, que busca fomentar el libre intercambio de mercancías.
Desde el pasado 1 de junio, Estados Unidos aplica aranceles de 10 por ciento a las exportaciones de aluminio mexicano. El Instituto del Aluminio destacó que si bien este sector es afectado, eventualmente puede dañar a otros sectores bajo la misma premisa.
El instituto agregó que una parte importante de las inversiones recientes y de la actividad productiva actual están destinadas a la exportación a Estados Unidos, por ello la aplicación de aranceles afecta la competitividad y las oportunidades a las que México puede aspirar con un acuerdo de libre de comercio.
Por lo anterior, solicitaron la intervención del gobierno mexicano con el fin de conseguir la excepción permanente de México en la aplicación de aranceles que dañan seriamente a la industria.
Sin embargo, personas cercanas a las negociaciones aseguraron que funcionarios estadunidenses están presionando a México y posiblemente a Canadá para que acepten un plan de cuotas que reemplazará a los aranceles impuestos por motivos de seguridad nacional a las importaciones de acero y aluminio.
Las tarifas a los envíos de metales no son parte directa de las conversaciones para actualizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLC), en momentos en que los funcionarios luchan por resolver sus diferencias antes de este viernes.
Estados Unidos impuso gravámenes a las importaciones de metales en marzo, pero en ese momento eximió a Canadá y México. En junio aplicó los aranceles a ambos vecinos.
Los tres países miembros del TLC consideran que resolver el problema es parte de una iniciativa mayor para normalizar sus relaciones comerciales, tras meses de aranceles recíprocos que aumentaron los costos e impactaron las cadenas de suministro para los fabricantes y agricultores de América del Norte.
El tema es políticamente complejo, ya que el gobierno del presidente Donald Trump ha convertido la reconstrucción de las industrias de metales básicos de Estados Unidos en una promesa clave para los votantes y considera que las barreras comerciales son una herramienta para lograrlo.