Tec de Monterrey invierte más de 41 mdp en el ESA
Edificio de Servicios de Apoyo, en lo que fuera anteriormente el CCI, se pone en marcha: Carlos Bejos Acebo
Con una inversión superior a los 41 millones de pesos, el Tecnológico de Monterrey, Campus Laguna, puso en marcha el Edificio de Servicios de Apoyo, en lo que fuera anteriormente el Centro de Competitividad Internacional. Carlos Bejos Acebo, director general de esta institución educativa, indicó que la idea es en un entorno de espacios abiertos brindan nuevas experiencias a colaboradores, estudiantes, padres de familia y visitantes. En recorrido realizado para los medios de comunicación, Bejos Acebo compartió que tras diez meses de remodelación, se reabrió lo que anteriormente se denominó el Centro de Competitividad Internacional y ahora se llama Edificio de Servicios de Apoyo. Este edificio se construyó en 1993, orientado a la competitividad internacional y ahora fue remodelado. “Además de ser sede de todas las áreas de apoyo del Campus, tiene además salas ejecutivas o de congresos donde se pueden realizar conferencias, además de un auditorio; viene a ser un espacio de trabajo que sustituye las oficinas privadas que se tenían, hay salas de juntas con diferentes modalidades y capacidades que cualquier persona puede reservar; hay 21 salas de juntas que puede reservar cualquier persona”, dijo. “Hoy hay una tendencia mundial hacia los espacios abiertos, y en el Tec se nos hizo coherente que al estar en vías del rediseño educativo y estamos orientando a los profesores y alumnos, también era importante hacer un rediseño en los espacios de trabajo”. Además, dijo que en México hay cifras donde un mínimo de corporaciones o instituciones que se han mudado a espacios abiertos, alrededor del 10% de empresas tradicionales que se han movido a espacios flexibles que se centra en las personas, espacios cómodos para trabajar haciendo equipo y comunidad, señaló. “Comenzamos por espacios académicos y ahora se alcanzó a los espacios laborales. Fueron 10 meses de trabajos, pero el balance a pocos días de haber migrado ha sido complicado, ha implicado un esfuerzo, pero vamos bien, el ambiente se ha sentido positivo, activo; al menos el 60% del día laboral no se está en el lugar”. Explicó que el objetivo del diseño de este edificio, está basado en teorías de psicología del color, donde con base en los distintos colores se pueden despertar diferentes emociones o generar algunos estímulos cerebrales, por lo que al ser muy colorido el espacio se puede favorecer la creatividad que se debe tener siempre despierta. Al tiempo, informó que ahora se cuenta además con un área denominada “maestro espacio”, en la que hay cocina para el café; donde no se usan desechables, hay vasos y tasas de vidrio, cada quien lo usa y se hace responsable de ello. Además, Punto Blanco es un área destinada a la relajación y la meditación, al contar con decoración mínima, y bancos de madera, espacio que invita a la reflexión y el análisis. Nap Room (espacios de siesta), 21 salas de juntas, siete salas ejecutivas para recibir hasta 300 personas y un auditorio para atender a 110 personas en las dos plantas del edificio.