Bíblico y furioso
Ni las paráfrasis del Evangelio, ni los discursos agresivos servirán para controlar la matanza. Dios de bondad, refrésquenle la memoria a Gamés: ¿quién gobierna Veracruz?, ¿quién gobierna en Minatitlán?...
Los Días de Guardar pasaron como un suspiro y a Gil no le supieron ni a melón. Regresa a esta página del fondo sin renovados bríos y con una bolsa de noticias no del todo optimistas. El Presidente envío un mensaje el viernes santo en su cuenta de Twitter: “Dicen que no es de su autoría (de Jesucristo), que ni siquiera es sermón, que si acaso es la suma –inconexa y heterogénea– de sentencias orales expuestas a lo largo de su historia cívica y religiosa. Alegan que fue estructurado por sus seguidores para aleccionar y conseguir feligreses”. Gilga reposaba y también su cerebro pues no entendió ni jota: ¿inconexo, heterogéneo, cívico, religioso? Estas cosas pasan si uno le hace caso al cura Solalinde, pero en fon, chacun sa vie politique.
En otro tuit del Presidente, Gamés como que quiso comprender: “pero qué bello es parafrasearlo: bienaventurados los pobres, los humildes, los que lloran, los que padecen persecución, los que tienen hambre y sed de justicia, y los de buen corazón”. Mientras Gilga empezaba a sentir piedad con la paráfrasis, buscó en ejemplar de la Biblia, versión de Casiodoro de Reina y encontró en Mateo 5:3-11 estas líneas: “bienaventurados los pobres de espíritu porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados los que lloran porque ellos recibirán consolación”. Aquí hay gato encerrado, Gil derramó dos lágrimas y no obtuvo consuelo. En resumen, acaso aconsejado (poetas: ¿es ésta una aliteración?) por Jesús Ramírez Cuevas, hombre de fe; por el cura Solalinde, hombre de fu; por Epigmenio, hombre de fo, el Presidente se despachó con el cucharón de la Biblia y dio su mensaje triste, pero lleno de esperanza; melancólico, pero pleno de ilusión, y así y asado.
El sonido y la furia
En esas estaba Gilga: que si el sermón de la Montaña, que si el santo sepulcro y el calvario, que si el Gólgota, en fon, piedad y corazón compungido, fe y caridad, cuando sufrió un sobresalto que casi le ocasiona una arritmia cardiaca. Otro tuit del Presidente unas horas después: “callaron como momias cuando saqueaban y pisoteaban los derechos humanos y ahora gritan como pregoneros que es inconstitucional hacer justicia y desterrar la corrupción. No cabe duda de que la única doctrina de los conservadores es la hipocresía. Son como sepulcros blanqueados”.
El Presidente se refería al memorándum que firmó para abrogar la reforma educativa. A Gil le va a dar algo. En pocas horas Liópez Obrador pasó de una bondad bíblica a una furia combativa de dar miedo. ¿Quién es quién? ¿Cuál es cuál? Todo esto dio lugar a una pequeña guerra de tuitazos: Vicente Fox tiró la primera piedra, Felipe Calderón, la segunda. Gamés llamaba a la calma: amaos los unos a los otros, pero nada, unos eran momias, otros pregoneros, otros hipócritas, los de allá conservadores. ¿Qué pisotean los de enfrente? Pisotean unos derechos humanos. Un grito desgarrador hizo añicos el silencio del amplísimo estudio; ay, mis hijos, bíblicos y furibundos.
El Presidente se despachó con el cucharón de la Biblia y dio su mensaje
Minatitlán
La noticia se incrustó como un dardo envenenado en la Semana Santa. La Secretaría de Seguridad Pública (SSP) en Veracruz informóqueelviernessanto13personas,entrelas cuales hay un menor de edad, fallecieron por un ataque armado durante la celebración de un convivio familiar en Minatitlán.
A Gil se le pusieron los pelos de punta. En la calle Leona Vicario, de la colonia Obrera, unos sujetos llegaron preguntando por El Beky (presunto propietario de un bar en el municipio). Posteriormente asesinaron siete hombres, cinco mujeres y un niño de dos años.
El Plan Nacional de Paz y Seguridad, propuestoporelPresidenteseñalaaseismunicipios veracruzanos por sus altos índices delictivos, entre ellos Minatitlán, Coatzacoalcos y Cosoleacaque. “Uno me apuntó y yo grité Dios, en tus manos encomiendo mi espíritu y perdóname por tu sangre preciosa, la sangredeCristotienepoder.Enesemomentooí disparos y pensaba que la que seguía era yo”, declaró una de ellas. Gil caviló: ni las paráfrasis del Evangelio, ni los discursos agresivos servirán para controlar la matanza. Dios de bondad, refrésquenle la memoria a Gamés: ¿quién gobierna Veracruz?, ¿quién gobierna en Minatitlán?
Todo es muy raro, caracho, como diría Cervantes: Encomiéndate a Dios de todo corazón, que muchas veces suele llover sus misericordias en el tiempo que están más secas las esperanzas”.
Gil s’en va