“Me gustan los retos difíciles, porque le pegan a mi orgullo”
Atleta paralímpica y alumna de la UNAM, acumula varias competencias y medallas; sostiene que antes del accidente, en 2012, pensaba estudiar veterinaria y jamás practicó un deporte
De valerse por sí misma, ahora Karla López debe utilizar una silla de ruedas para desplazarse y cumplir sus actividades cotidianas; el deporte no estaba entre ellas, pero la necesidad de ejercitar su espalda y sus brazos la hizo darle un nuevo enfoque a su vida. Hoy, esta joven de 18 años es una atleta paralímpica que representa a la UNAM y ha destacado en cuatro Paralimpiadas Nacionales en lanzamiento de jabalina y de bala.
Tras su accidente en 2012, ahora compagina el estudio con el deporte; dejó su interés por ingresar a la Facultad de Veterinaria y espera entrar a la carrera de diseño y comunicación visual.
Su nueva condición no es obstáculo; sigue cumpliendo metas y objetivos, además siempre tiene espacio para desarrollar otros pasatiempos, como la fotografía.
¿Cómo te ha ido en el deporte?
Llevo aproximadamente cinco años en el atletismo de campo y llevo cinco Paralimpiadas, ya que en ese evento es más oficial la práctica de este deporte.
“En mi primera participación me fue muy bien y ahí solo hacía lanzamiento de jabalina y bala, y como no alcancé la marca para la medalla de oro en jabalina me dieron la de plata, pero como nadie dio marca para la dorada, gané ese evento. En 2016 y 2017 obtuve el oro en impulso de bala, pero en 2018 fue cuando obtuve el mayor número de medallas, dos de oro y una de plata”.
¿Qué objetivos tienes ahora?
Fue mi último año en el CCH, dejé un poquito el deporte para concentrarme en subir mi promedio y asegurar mi lugar en la UNAM, pero quiero terminar mi ciclo en este deporte; me cambiaron mi clasificación recientemente, ahora las marcas son más complicadas, ya que por mi lesión medular no puedo hacer tanto esfuerzo, mi entrenador y yo llegamos a la conclusión de que al cerrar este ciclo intentemos cambiarnos a otro deporte, como tiro deportivo y con arco.
¿Un giro a tu vida deportiva?
Aún no estoy segura, porque ya le agarré cierto aprecio al atletismo de campo; me gusta esa adrenalina en cada lanzamiento y todo lo que entrenaste durante varios años se resume en seis tiros. A mi hermano y a mí nos llamaba la atención el tiro con arco y fuimos a unas clases, pero por el nivel de mi lesión medular solo puedo hacerlo como hobby, entonces quería un nivel competitivo y fue como llegué al atletismo de campo, pero tiro con arco o deportivo es lo que me atrae.
¿Qué necesitas para competir internacionalmente?
Aún estoy muy lejos de las marcas que piden para una competencia internacional. Antes era clasificación F53, con marcas que apenas estaba alcanzando, y como ya tengo mayor movilidad de cuando empecé, ahora soy F54; entonces los registros que me piden ahora son más difíciles. “Nada es imposible, solo cuesta un poco más, eso llega a mi orgullo y hace exigirme más para esas marcas”.
¿Cómo te afectó el accidente?
El accidente fue cuando estudiaba la primaria, en 2012, y hubo cambios en nuestra forma de vivir, porque antes todo lo hacía muy normal y rápido, sin preocuparse tanto, ahora cada que salimos a un lugar tenemos que ir con calma y ver que sea un lugar adaptado e ir con más precaución. Para socializar antes era tímida, en un inicio me daba pena acercarme, pero he visto que ahora vivo con más cautela y más precaución.
¿Practicabas algún deporte?
No. Previo a ese percance me gustaba la gastronomía, hubiera conseguido una carrera de ese estilo, y en el deporte no hacía nada porque no me gustaba, era muy perezosa, prefería dormir que comer. El accidente cambió esa percepción que tenía y ahora me gustaría estudiar diseño y al deporte ya le agarré cariño porque vi que es bueno para mí.
¿Juntarás tu vida deportiva y universitaria?
Los dos van a la par, porque el deporte me ha forjado disciplina, que igual es muy necesaria para la escuela y no dejar todo a la última hora y estarse desvelando. Cuando leí el plan académico que ofrecía la carrera de diseño y todas sus cualidades me gustó mucho. Me gustaría terminar con la licenciatura, pero también seguir con el deporte, porque me exige a esforzarme más y tener una mejor calidad de vida.
¿Qué otras cosas haces?
Soy muy perezosa y me gusta ver videos o escuchar música, adoro mucho los animales, paso tiempo con mis mascotas, con un gato y un perro; realmente me la paso relajada cuando no estoy en la escuela o en el deporte.
“Hubo un tiempo en que pensaba estudiar veterinaria, pero es mucho esfuerzo físico y estarse desplazando a muchos lugares; me decidí por el diseño ya que es un poco más tranquilo. Aquí en el CCH Oriente hay muchos perros alrededor y era de moverme de un salón a otro, siempre hacía las paradas técnicas para acariciar a los perritos que se me atravesaban, me gustan mucho, y de igual manera me gusta la fotografía, y todo ello se complementa”.
¿Cómo te atrapó la fotografía?
Ahora todo se resuelve con tutoriales en YouTube, ahí aprendí a manejar los aspectos de la luz, pero generalmente agarro mi celular o mi cámara y así es como he aprendido un poco. Me gusta recordar momentos importantes y una fotografía es muy buena para eso, me gusta tomar fotos de paisajes para recordar dónde estuve y qué estuve haciendo.
Mientras resuelve su futuro universitario, Karla está lista para continuar en el deporte, la fotografía o cualquier otro reto.