“La riqueza del desierto salvaría agua lagunera”
Generador de empleos. Jesús Cuauhtémoc Orona Flores propone la recolección del mezquite, la producción de dátil y orégano para poder mantener una economía y cuidado del líquido en La Laguna
Integrada desde el año 2002 y reconocida como una asociación con personalidad jurídica en el 2003 para atender y tramitar programas de desarrollo, la Fundación “Salvemos al Desierto”, tiene como finalidad resolver los problemas del semidesierto y en donde existe una gran riqueza de plantas.
Conformada por 12 personas, es una Asociación Civil sin fines de lucro, la cual busca beneficiar a la mayoría de los campesinos, aunque reconoce su presidente, Jesús Cuauhtémoc Orona Flores, que no ha sido nada sencillo debido que se trabaja con recursos propios y colaboraciones de personas interesadas en los problemas que enfrenta el desierto.
La Fundación “Salvemos al Desierto” ha trabajado en el área del mármol en ejidos como La Mina en el municipio de Lerdo, así como también con la Palma Datilera, que soporta grandes concentraciones de sal en el agua, por lo que miembros de la fundación trabajan en la producción de dátil.
Una palma da entre 150 kilos de dátil que actualmente está en el mercado a 180 pesos, por lo que cada palma representa 15 mil pesos y en cada hectárea se puede trabajar hasta con 100 palmas, lo que genera un millón 500 mil pesos.
Existen áreas en el municipio de San Pedro, así como en Viesca, que podrían ser aprovechadas para la producción de dátil, lo que aseguran podría ser otra opción para la economía de la Comarca Lagunera.
“Nuestra propuesta es arrancar con un vivero y dar las palmas datileras de los ejidos, no es fantasía, lo podemos comprobar por el resultado que tiene la palma datilera”.
Otras alternativas
Muchas de las veces, señala, se le ha querido culpar de todo a los productores de leche, sin embargo, asegura que existen otras alternativas para poder mantener una economía y cuidado del agua.
“Echarle la culpa a los lecheros, es irresponsable, nosotros tenemos que buscar alternativas para decirles que no saquen más agua para la leche, porque hay otra actividad que genera empleo”.
Otra de las propuestas en las que trabaja la fundación, es la recolección del mezquite, un árbol que señala, ha sido despreciado, aún y cuando tiene una gran riqueza.
Con la reforestación, dijo, beneficia en las condiciones climáticas, sin embargo también una poda moderada también puede ser aprovechada para el carbón, lo cual no se ha aprovechado.
“El mezquite genera una vaina que tiene el doble de proteínas que el maíz, se puede hacer pan para el ser humano y forraje para el ganado y además se puede hacer una infusión aromática con sabor y olor a café”.
Existe también en la región el orégano, del que señalan, una de las zonas más productivas más grandes a nivel mundial, es el desierto lagunero.
“Se utiliza en infusiones de medicina, en aromas, en fijadores de aroma, es otro hermano del desierto al igual que la candelilla y que también la despreciamos y sirve para pintura, cosmetología, pero vemos a nuestros hermanos como medios o terceros hermanos o parientes lejanos”.
Es por eso que la fundación busca rescatar no sólo a las plantas, sino al hombre del desierto, pues la mayoría de los ejidos rentaron, vendieron tierras y agua, sin embargo queda el desierto y eriazos para poder explotarlos.
La fundación, envía propuestas a los gobiernos, por lo que actualmente buscan ser escuchados tanto el Gobierno de Coahuila, como de Durango, ya que señalan que lo más importante es contar con agua en La Laguna.