Viridiana y la jodida justicia mexicana
En
agosto de 2014, Viridiana Molina fue arrestada frente a sus hijos. Como se acostumbra, fue maltratada y torturada en arraigo por un par de meses antes de ser puesta en prisión, acusada de delincuencia organizada y beneficiarse de dinero de procedencia ilícita.
La verdad es que la autoridad iba por su pareja, pero se la encontraron a ella y pues para adentro, total ¿qué es eso de la presunción de inocencia? se han de haber preguntado. Cuatro años y medio después. Sí, cuatro años y medio después, Viridiana salió de prisión absuelta de los delitos de los que se le había acusado. No había elementos.
Viridiana vio lo que era la justicia y la condición de las mujeres en las prisiones y desde el día que salió, hace poco más de dos años, se volvió una activista para mejorar la vida de las mujeres en prisión y que la justicia se implemente con perspectiva de género, porque ella había sido encarcelada por ser pareja de un presunto delincuente.
En 2019, la Fiscalía General de la República decidió apelar la sentencia y en segunda instancia un tribunal colegiado revocó la primera sentencia absolutoria. El caso fue siempre del interés del Instituto Federal de la Defensoría Pública que lo tomó, acompañado de varias organizaciones de defensa de los derechos y los de las mujeres.
El instituto apeló la segunda sentencia
Su destino se sabrá en 10 días y puede, una vez más, regresar a prisión
en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. El pasado 14 de julio, la SCJN desechó el caso por considerarlo poco relevante bajo el nuevo criterio, después de la última reforma judicial, de “interés excepcional”.
Como último recurso, el Instituto Federal de la Defensoría Pública puede impugnar esta decisión y uno de los ministros de la SCJN tendrá que decidir si se admite o no definitivamente.
El destino de Viridiana se sabrá en 10 días y podría, una vez más, regresar a prisión. La sola revisión en estas líneas demuestra todo lo mal que está el aparato de justicia: el arresto, el largo arraigo, los años para ser sentenciada, al colegiado que no tomó en cuenta ni la tortura ni la falta de elementos y ahora la Suprema Corte, que por un asunto “procesal” no quiere revisar el caso.
Y sí, Viridiana puede regresar a prisión en unos días.
Todo mal, dicen.