Pared blanca
En la era de la hiperconectividad, el aburrimiento parece que quedó atrás; sin embargo, ese estado mental ha sido clave para algunas de las invenciones más revolucionarias de la humanidad
ELas redes sociales limitan las oportunidades para que la mente divague y genere ideas innovadoras
Los periodos de alta concentración duran alrededor de 25 minutos, seguidos de un breve descanso
ntre semana he tomado la costumbre de caminar entre tareas. Mi rutina se ha vuelto más comoun como un proceso de cacería que la figura monótona de trabajo de oficinte, oficina que tenemos en mente, sentado senutadora frente a una computadora sin parpadear. Periodos os cortos de trabajo intenso, seguidos uidos de la tranquilidad de caminar nar para pensar, hacer llamadas s y escuchar esducxpoesar podcasts. Mi productividad ha aumentado exponencialmente; al regresar de estas caminatas tengo ngo claro lo que tengo que hacer acer y puedo tener procesos s de hiperenfoque. En algunos - de estos sprints, me doy cuenta de que hago más tareas y resuelvo más problemas de los que norr normalmente podría haber sido todo toslas un día de trabajo.
Algunas de estas ideas las tok, tomé del libro DeepWork, de Cal Newport (el cual recomiendo, miendo, no solo para leer, sino para ara llevar conscientemente a la práctica), ráctica), pero algunas otras han sido deina derivadas de ver qué funciona para mí y qué no. Al final, la paradoja del aumento de productividad parece que viene derivada de dos fuentes: los seres humanos no estamos hechos para largos periodos de concentración y el poder del aburrimiento.
Concentración: para entender el tiempo máximo que los seres humanos podemos estar en una tarea, normalmente se hace referencia a la técnica Pomodoro, desarrollada por Francesco Cirillo en la década de 1980. Esta técnica sugiere que los periodos óptimos de alta concentración duran alrededor de 25 minutos, seguidos de un breve descanso de 5 minutos. Existen algunos otros estudios que marcan como tiempo máximo 45 a 50 minutos, tras lo cual el rendimiento puede comenzar a disminuir.
Aburrimiento: en la era de la hiperconectividad en la que estamos viviendo, el aburrimiento parece que quedó atrás, que lo vencimos como si se tratara de un mal; sin embargo, este estado mental, a menudo malinterpretado, ha sido clave para el funcionamiento de nuestro cerebro y también ha sido el causante de algunas de las invenciones más revolucionarias de la humanidad. Newton y la ley de la gravedad se dieron un periodo de aislamiento forzado debido a la peste, donde Newton se encontraba sin distracciones. Otro ejemplo notable es el de Arquímedes, quien en un momento de aburrimiento y relajación en su baño descubrió el principio que lleva su nombre, fundamental para la física de fluidos.
¿Cómo podemos unir dos conceptos que parecen antagónicos? Concentración y aburrimiento.
De nuevo, como en gran parte de mi vida, creo que el equilibrio está en los extremos. Periodos de alta concentración con pocas distracciones, seguidos por periodos sin tener nada en particular y donde permitamos que la mente divague, unir conceptos y pueda pensar libremente sin presiones. Un equilibrio que solo se puede ver si nos vamos a 10 mil metros, pues de cerca parecerá que todo es caos. De cerca, parecerá que perdimos la cabeza y somos volátiles e impredecibles, cuadrados y desapegados de la realidad. Con distancia, nos veremos dueños de nuestro proceso creativo y de lo que tenemos t que hacer. Tendremos dremo más intención en el uso del tiempo tiem y enfoque.
Elab El aburrimiento no es solo una ausencia ausenc de actividad, sino un espacio pacio para p la incubación de ideas. Científicamente Científ esto se debe a la activación activ de la “red de modo predeterminado” predete (Default Mode Network Netwo o DMN, por su sigla en inglés) inglés del cerebro durante estados dos de inactividad. Esta red facilita cil el pensamiento reflexivo vo y creativo, y su activación puede ser estimulada por el aburrimiento. Además, puede aumentar los niveles veles d de dopamina, fomentando la motivación motiv y la innovación.
En contraste, c los tiempos modernos dernos van en dirección opuesta con un flujo constante de estímulos los que inhiben el aburrimiento. Parece que vencimos a un falso enemigo. enemig Nuestros celulares y computadoras compu se vuelven cada da vez m más omnipresentes y las redes sociales s crean un ciclo de atención atenció constante, limitando las l oportunidades para que la mente divague y genere ideas innovadoras. ¿Cómo puedo lograr que mis hijos se aburran y vean valor en ello? Primero, me tomé a la tarea de entender más sobre el efecto que tiene en mí. No puedo pregonar e imponer algo sobre lo que apenas entiendo.
Soy novato en esto, pero ahora veo el valor de poder sentarme frente a una pared blanca con el solo objetivo de aburrirme, caminar con el solo objetivo de poner en orden mis pensamientos. La pared blanca es la representación figurativa de no tener que llenar mi espacio de atención. Aunque también recordando que mi equilibrio lo encuentro en los extremos y acabando este periodo viene un periodo desenfrenado de energía para hacer más pendientes que lo que antes hacía en todo un día.
La próxima vez que me veas, puedo estar completamente ocupado viendo una pared blanca o caminando sin rumbo. Sin estos periodos, no podría tener el espacio para el siguiente sprint, acelerar al mundo y romper las fronteras.