Gran entrada, pero sin triunfadores
Ante un gran lleno, la Plaza México reabrió sus puertas para la primera corrida de la temporada, aunque Joselito, Silveti y Roca Rey no tuvieron éxito en el ruedo
Monumental Plaza de Toros México. No hubo sorpresas con los de Fernando de la Mora, ahora de Tequisquiapan criados en Querétaro. Elpúblicosellevólatarde.Fenomenal y extraordinario ambiente en la reapertura. Roca Rey en la peor tarde de su vida. Silveti sigue siendo el mismo y Adame con su habitual voluntad.
El festejo inició 15 minutos tarde. Algo insólito en esta plaza. Llenazo absoluto. Nunca pensaron los antis que al tratar de prohibir la fiesta la acabarían calentando. Gracias antis, nunca cambien.
No hubo tela de dónde cortar. Todosestuvieronamerceddeljuego de los toros.
AbrióconlacapaJoselitoAdame de hoja seca y oro. Sin fijeza de pies. Todo lo contrario con la muleta. Sapienciaconladerecha.Faenaconalgunos buenos muletazos. Estocada alencuentro.Dospinchazos.Media tendida. Se le hizo de hueso el toro. Fallóconlaespadacorta. Unaviso.
Ante su segundo complació a la gente banderilleando sin mucho éxito, pero sí con transmisión. Inició de rodillas y su toro también estuvoderodillascasitodalafaena. Toro sin fuerza, pero sí voluntad de Joselito con algunos cambiados por la espalda que emocionaron a sus seguidores. Cerró con ajustadas manoletinas. Pinchazo y media. Silencio.
De verde bandera y oro, Diego Silveti dejó fijo los pies en un lúcido quite por gaoneras. Inició con el típico péndulo, al estilo de su tío apoderado. Buenos derechazos que no emocionan al tendido por no cargar la suerte. Entera caída. Leve petición. Saludó al tercio.
Ante el quinto, Diego pegó infinidaddemuletazos, lamayoríadespegados que no transmitieron al público. Quiso enderezar su actuación, pero la gente le gritó “toro, toro”,recriminándolesuactuar.Mató depinchazoyentera. Aplausos.
También vestido de verde bandera y oro, el peruano Roca Rey sorteó en su primero un toro que no tenía un pase. Pegado al piso. Se cansó de pinchar y fallar con la corta. Abucheos.
Ante el sexto, Andrés pegó un buen quite por chicuelinas. Con la muleta retó al viento y se la jugó con cambiados por la espalda muy vistosos que le llegaron al público. El toro se acabó muy pronto y le dio por pinchar. Escuchó los tres avisos y se le fue vivo el burel al corral. De nuevo abucheado.
Las figuras también lloran
Fuimos testigos de la peor tarde de la vida taurina de Roca Rey, dicho por muchos, primera figura del toreo. Que pronto pase el mal sabor de boca.
Protestas
Antes del paseíllo, fuera de la plaza, algomásdeunacentenadeantitaurinos agredieron a aficionados que acudieronalacorrida.
Los inconformes pasaron de los gritos de “¡Asesinos!” y “¡El toro quiere vivir!” a arrojar objetos a los taurinos e intentar ingresar a la fuerza a la Plaza México, al tiempo que hicieron pintas con pintura roja emulando sangre.
Otros manifestantes ocuparon piedras y tubos para dañar el inmueble. manifestantes._
“Son asesinos que se merecen eso y más. Estas escorias necrófagas que vienen a divertirse con el sufrimiento de animales inocentes, a burlarse”, dijo a uno de los