Anabel frente a la Cuarta Transformación
AnabelHernández lo volvió ahacer, laperiodistapublicó una columna en la que hace una denuncia muy seria, posible por supuesto, pero esa, en lo particular tiene impacto y justamente esa trascendencialaobligará, entodocaso, apresentar pruebas.
Hernández García aseguró que el Cártel de Sinaloa financió la campaña de Andrés Manuel López Obrador en 2006, elección que perdió con el entonces panista Felipe Calderón, en la editorial, Anabel asegura que personajes encumbrados del narcotráfico en México habrían aportado entre dos y cuatro millonesdedólaresparaqueeltabasqueño, hoyPresidentedeMéxico, consiguierala posición que ahora ostenta. Confirma además que existen audios obtenidos durante la investigación de la Agencia para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés) y el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, en los que miembros de la organización delictiva y personas cercanas a LópezObradordeclararonhaberparticipadoenlosmovimientosdedineroilegales, es importante destacar que no porque la DEA lo documente, los resultados de la investigación deban ser reales.
Anabel Hernández asegura que el dinero, presuntamente aportado por ArturoBeltránLeyvaeraentregadoaNicolás Mollinedo en ese entonces el chofer y fielescuderodeAndrésManuel, Nicoera el enlace que tenía con los capos.
Insisto, Anabel Hernández ha incendiado escenarios impensables, pero reales, relaciones de políticos con líderes delincuenciales, relaciones de artistas o de mujeres famosas con hombres poderosos en las diferentes células delictivas que operan en el país, pero no es lo mismo, definitivamente no es lo mismo Galilea o Panini que López Obrador y ahí la periodista primero está obligada sí o sí a presentarpruebasqueavalensusdichos porquedeserciertosestaríamosanteun graveytortuosoescenarioparatodoslos mexicanos: Las células del crimen organizado en contubernio con la primer línea de poder en México y lo peor de esto, es la libertad en la que los delincuentes podrían moverse en el territorio nacional, otra vez, esta situación es a todas luces anómala, pero real, posible, ahí está Genaro García Luna.
Anabel Hernández está de frente a la maquinaria de la Cuarta Transformación,
revelaciones._ esa que enarbola una idílica teoría de gobernanza: Abrazos no balazos y sus dichos van a retumbar hasta el último rincón del Palacio Nacional, pero creo que también es necesario que justifique sus incendiarias
Anabel Hernández ha incendiado escenarios impensables, pero reales