vatios de nueva capacidad, esto representa más de 2 mil millones de dólares. Estas inversiones se vienen dando desde 2016, algunas entraron en operación y a lo largo del año se verán otras más.
Señaló que en 2018 las inversiones pueden ser un poco mayores, porque entrarán varias plantas ganadoras de las subastas, así como otros proyectos de privados.
Respecto a que a diferencia de las dos primeras, en la tercera hay otros dos compradores aparte de la Comisión Federal de Electricidad, señaló que se tiene que conocer cómo empata con ofertas de los suministradores; “no es muy grande la oferta de privadas, pero tampoco es nada despreciable”.
Se espera que los que están obligados a cumplir con el requerimiento de participación de energías limpias con los certificados (grandes usuarios como industrias y comercios) detonarán más ese tipo de proyectos, pues para 2018 tendrán que salir a conseguir, ya sea a través de las subastas o por contratos bilaterales.
Para esos últimos, apuntó que se observará cada vez más interés de empresas que están creciendo y que necesitan más energía, como las industriales y comerciales, por lo que se comenzará a dar un fenómeno más de consolidación de compañías que demandan energía limpia.
Por su parte, el presidente de la Asociación Mexicana de Solar Fotovoltaica (Asolmex), Héctor Olea, refirió que el sector está muy comprometido con el programa de subastas, particularmente la que viene, pues se espera que en noviembre se den los resultados, de acuerdo con lo dicho por la Secretaría de Energía. “Esperamos tener una participación igual o mayor a la de las subastas anteriores, así que estamos muy optimistas de que será muy buena para el sector”, dijo.
Olea coincidió con el presidente de la Amdee, en que es probable que los precios repunten, pues el financiamiento se ha encarecido; “pero fuera de esto el mecanismo está muy bien armado y tenemos mucha confianza de que va a seguir funcionando”.
En la parte solar se espera comprometer mil 500 megavatios más de capacidad en la tercera subasta y con ello se alcanzar la meta de 5 mil megavatios nuevos de capacidad para 2020, con una inversión de 5 mil millones de dólares.