El reto de la asistencia social
David Cameron considera que hubo avances durante su gestión pero hay un enorme desafío para financiar las necesidades de atención social en el Reino Unido.
David Cameron realizó una intervención política poco habitual desde que dejó el cargo como primer ministro del Reino Unido. Expresó su pesar por el historial de su gobierno en la asistencia social y pidió un nuevo enfoque sobre cómo pagar los “catastróficos” costos para el cuidado de las personas con demencia.
“Hay un enorme desafío de financiamiento para la asistencia social al que tenemos que responder. Acepto que logramos algunos avances, pero no resolvimos el problema”, dijo Cameron. “Todo el mundo sabe que es un problema difícil. Se han hecho muchos esfuerzos para tratar de resolverlos pero todavía no lo logramos”.
El financiamiento a la asistencia social se convirtió en un asunto tóxico para el Partido Conservador en el periodo previo a las elecciones generales anticipadas de este año. Theresa May, la sucesora de Cameron, propuso que los británicos deben usar todo menos las últimas 100,000 libras de sus activos, incluyendo su casa, para pagar por la atención.
Los opositores apodaron al plan como un “impuesto a la demencia”, y se responsabiliza de manera general a la propuesta de contribuir a su derrota en las urnas. May siguió como primera ministra, pero los Conservadores perdieron la mayoría en la Cámara de los Comunes.
Cameron, quien trata de mantenerse alejado de la política interna desde que renunció a su cargo poco después del referéndum del Brexit, el año pasado, realizó sus comentarios más recientes en su calidad de presidente de Alzheimer’s Research UK, la organización benéfica que apoya el Financial Times para su Seasonal Appeal.
El exprimer ministro sugirió que así como los investigadores para el cáncer encontraron una “forma para salir del bosque”, los científicos que indagan el Alzheimer podrían hacer lo mismo con una alianza adecuada de filántropos y empresas farmacéuticas. “Se realiza un gran trabajo y creo que habrá una cura”, dijo.
Cameron expresó su pesar sobre la asistencia social cuando le preguntaron ¿cómo iba a lograr su compromiso de 2015 respecto a tener un plan, para 2020, de atención personalizada para los ciudadanos con demencia en el Reino Unido?, cuando la realidad era que había un presupuesto nacional ajustado para la atención social.
Dijo que le decepcionó el desplome de las reformas previstas por su gobierno con las que se introduciría un límite de 72,000 libras en las sumas que las personas tenían que pagar por costos de atención en el hogar, y que el estado cubriría cualquier cuenta adicional.
Cameron declaró que la reforma social sería una prioridad para su gobierno, pero en julio de 2015, los ministros anunciaron que se posponían las reformas previstas.
Los ministros esperaban que la industria de seguros introdujera productos para garantizar que las personas no tuvieran que verse obligadas a contar con 72,000 libras, pero las aseguradoras se mostraron reacias a ingresar al mercado, en parte, debido a la incertidumbre sobre las posibles responsabilidades.
“La decepción que tuve fue que esperaba que una combinación del tope en los costos de atención ayudaría a ofrecer un modelo de seguro, donde crecería un mercado para que todo el mundo pudiera asegurarse contra el costo de la atención a largo plazo”, dijo Cameron. “Y todavía no podemos descifrar eso”.
“Aún pienso que hay una respuesta”, agregó. “La alternativa de extender en efecto el National Health Service a la asistencia social, creo que probablemente no sea la respuesta correcta. Ya no estoy en la política, pero debemos encontrar una respuesta. Teniendo en cuenta el costo catastrófico de la atención que las personas enfrentan por la demencia, tenemos que encontrar una mejor respuesta en eso”, dijo.
Theresa May prometió un informe preliminar sobre el futuro de la asistencia social para el verano, pero a los activistas les consternó la ausencia de cualquier financiamiento adicional en el presupuesto del mes pasado. Age UK dijo que más de 1 millón de personas mayores en Inglaterra no tenían la atención que necesitaban, y “temía por el estado de la asistencia social” en el momento en que se publicó el documento del gobierno.
David Cameron, exministro del Reino Unido, dice que logró avances en este tema, pero que todavía se deben seguir los esfuerzos”.