LA GRAN APUESTA
Los analistas dicen que los temblores en los mercados emergentes crean oportunidades de compra.
¿La marea por fin cambia a favor de los mercados emergentes? El índice MSCI para el desempeño de las acciones de mercados emergentes cayó 6.21%, y cerca de 15% por debajo de su punto máximo, que alcanzó en enero.
El dolor también se extendió al mercado de renta fija. Los bonos de gobiernos de mercados emergentes con denominación en dólares generaron rendimientos negativos este año de 3.3%, de acuerdo con el índice EMBI global de JPMorgan.
El aumento de los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, las crecientes tensiones comerciales y las señales de una desaceleración en China, conspiraron para quitarle atractivo a los activos de los mercados emergentes.
Pero muchos analistas sostienen que hay oportunidades para lanzarse al ruedo. “Un derrumbe en las acciones de los mercados emergentes creó valor en un mundo donde el valor de buena calidad es escaso”, dice Richard Turnill, jefe estratega de inversiones globales de BlackRock.
Turnill dice que los “riesgos de cola” aumentaron para las acciones de mercados emergentes. Por su parte, Alessio Rizzi, estratega de cartera en Goldman Sachs, ofrece una opinión similar: “Nos siguen gustando las acciones de mercados emergentes, ya que creemos que tienen en su precio una desaceleración de crecimiento”.
Lauréline Chatelain, estratega de renta fija de Pictet Wealth Management, menciona que “las nubes de la guerra comercial” dejaron al gestor patrimonial en una posición neutral en los mercados emergentes en su conjunto para los próximos tres a seis meses.
Agrega que los inversionistas deberían ser “muy selectivos a la hora de elegir los bonos de mercados emergentes”. Y sugirió evitar los bonos de los gobiernos locales, “preferimos los países con mejores perspectivas económicas y una menor exposición al comercio internacional como India y, hasta cierto punto, México”, dice.