Pendiente restauración de casas de El Mirador
En lo alto del cerro de El Mirador, al costado izquierdo de las antenas, es posible ver unas pequeñas construcciones entre lo verde de la vegetación. Las pequeñas casas forman parte de la colonia Veraniega Mirador, las cuales pertenecieron a tres familias regiomontanas y que en junio cumplirán 120 años de su construcción. En una de esas pequeñas casas de madera estilo victoriano pasó su infancia Alfonso Reyes Ochoa, el escritor en lengua castellana más importante de la primera mitad del Siglo XX.
La arquitecta e investigadora Mónica Ovalle Salas ha recorrido esta colonia, ahora protegida por particulares, quien junto con el restaurador Alberto Compiani reseñaron la historia y estado de conservación del sitio, hace unos años.
En entrevista, Ovalle Salas resalta que “afortunadamente” las construcciones se encuentran en buen estado de conservación. No obstante, es necesario que sean restauradas para prolongar la vida de sus materiales, la mayoría edificada en madera. “Afortunadamente se encuentra en buen estado de conservación, aunque es importante se le realice una restauración; hace aproximadamente dos años le hicieron una renovación a la techumbre”, destaca Mónica Ovalle en entrevista vía correo electrónico.
Desde 2005, intelectuales, escritores e historiadores han solicitado la intervención de autoridades de Nuevo León o de la UANL para que se haga un plan de restauración, sin encontrar una respuesta positiva. “Estoy colaborando con ellos en la revisión de un plan general de desarrollo para el sitio, con la intención de devolverle su lectura como documento histórico y significativo, que reviva como el lugar de veraneo que fue”, indica Ovalle.