Debate de roles impulsa ejercicio de la paternidad
La visibilización de las problemáticas de violencia familiar y hacia la mujer es uno de los factores que ha generado este fenómeno
El debate sobre los roles de hombres y mujeres impulsado por las teorías de género ha propiciado que cada vez haya más apertura en el ejercicio de la paternidad.
Especialistas en familia y perspectiva de género consideran que la visibilización de las problemáticas de violencia familiar y hacia la mujer es uno de los factores que ha generado este fenómeno; sin embargo, aún existe una presión sociocultural que limita al varón a tomar únicamente el papel de proveedor en el hogar.
Miguel Villegas Lozano, coordinador de Equidad y Género de la Facultad de Psicología de la UANL, recordó que en décadas pasadas la paternidad estaba culturalmente deslindada de cualquier efecto educativo sobre los niños.
Aunque las parejas modernas ahora son capaces de negociar la repartición de las tareas del hogar e incluso el tema económico, ver a un hombre muy involucrado en las labores de crianza de los pequeños sigue causando sorpresa.
Este efecto, dijo el experto, se debe a que en la sociedad prevalece la rígida idea de los roles de género. “Se puede visualizar este efecto al ver las reacciones que la gente tiene al ver a un papá involucrado: ‘mandilón’, ‘te manda tu vieja’, frases con todo el peso machista y patriarcal. “Por otro lado también hay comentarios de admiración hacia estos papás, como si estuvieran haciendo algo extraordinario cuando no lo es. Los heroízan por estar haciendo algo que les corresponde”, resaltó.
La sexóloga Karla Urriola González, por su parte, destacó que al participar activamente en la crianza, los hombres logran un vínculo diferente con sus hijos.
Mencionó que el involucramiento de los varones ha sido posible debido a que gradualmente se han abierto los espacios que antes eran “exclusivos” para las mujeres. Por ejemplo, comentó, en la antigüedad los padres no podían estar presentes en el momento del nacimiento de su hijo.
Asimismo, indicó que la cercanía de los hombres con sus hijos contribuye a que estos adquieran mayor seguridad personal y tengan libertad para decidir sobre su vida. “La ruptura de estereotipos ayuda a que los hijos puedan ir construyendo cómo quieren ser, y no tener una imposición de cómo deberían ser. “Cuando no hay un verdadero vínculo, no se conoce al padre más de lo que el hijo sabe por interacciones de otros; es algo ajeno o idealizado”, expuso.