Policía rusa mata a hombre que apuñala a siete personas
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) revindicó un ataque con cuchillo que dejó siete heridos en Surgut, en la región rusa de Siberia, cuyo autor fue abatido por la policía, que abrió una investigación por “tentativa de homicidio” y no por “terrorismo”. Según el Comité de Investiga- ción ruso, órgano encargado de las principales investigaciones criminales, ayer por la mañana, un hombre “atacó a peatones” en las calles céntricas de Surgut.
A través de un comunicado, la policía informó que al menos siete personas fueron hospitalizadas tras resultar heridas en el ataque.
Del responsable, un encapuchado que fue abatido por las fuerzas de seguridad por tratar de “resistirse” al arresto, la policía aseguró que fue identificado como un hombre nacido en esa misma ciudad en 1994.
Por su parte, el EI, a través de un comunicado divulgado por su agencia de propaganda, Amaq, identificó al “asaltante” como uno de sus “soldados”.
Mientras tanto en Finladia, la policía continuaba investigando ayer el apuñalamiento que costó la vida a dos mujeres el viernes, e identificó a su presunto autor como un ciudadano marroquí de 18 años.
Inicialmente “el acto fue investigado como asesinato pero durante la noche recibimos información adicional que indica que se trata de un ataque terrorista” dijo la policía en un comunicado. La policía española continúa con los esfuerzos por encontrar a uno de los últimos miembros aún fugados de la célula yihadista que cometió los atentados de Barcelona y Cambrils, ambos reivindicados por el grupo EI.
Tras el atentado en la zona turís- tica de Las Ramblas, de Barcelona, que causó 13 muertos y más de 120 heridos, así como el de Cambrils, en el que murió una persona, el gobierno decidió mantener el nivel de alerta antiterrorista en 4 sobre una escala de 5.
El ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, afirmó que la célula responsable de los ataques, compuesta por una docena de personas, ha quedado “desmantelada”.
Sin embargo, el consejero de Interior del gobierno regional catalán, Joaquim Forn, se mostró más cauto, afirmando no poder “dar por finalizada” la investigación hasta que se detenga “a las personas que forman parte de esta célula terrorista”.