“HAY PREJUICIOS HACIA JÓVENES”
Alberto Ruy Sánchez presenta Los sueños de la serpiente
En Lossueñosdelaserpiente (editorial Alfaguara), el novelista y editor Alberto Ruy Sánchez retrata a un hombre que va mudando recuerdos como si se trata de un reptil que cambia su piel.
La novela se presentó en la Feria Internacional del Libro de Monterrey, donde también el novelista mexicano clausuró las sesiones del Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes, con una charla relacionada al oficio literario.
En entrevista con MILENIOMonterrey, Ruy Sánchez se define como un autor que prefiere escuchar más y hablar menos, incluso se descarta como una figura referencial en materia de consejos: “No soy una persona que dé consejos ni alguien que crea que es ejemplar”. Clausuras el Encuentro Nacional de Escritores Jóvenes, ¿cómo es hablar con los autores de final del siglo pasado? Con mucha frecuencia hablo con los jóvenes, me gusta mucho dar conferencias y clases con ellos, tanto en México como Estados Unidos. No soy una persona que dé consejos ni alguien que crea que es ejemplar, en nada. Me gusta con más frecuencia escucharlos que hablarles. Existen algunos prejuicios sobre la generación de los nacidos después de los 90. Los vimos ahora con su solidaridad en el temblor, ¿qué te pareció? Lo que me enseñó es que la gente que se sorprendió estaba llena de prejuicios. Más que descubrir o no si los jóvenes hacen algo u otro, lo que me demostró es que la gente está llena de prejuicios hacia los jóvenes. En mi caso nunca pensé que estuvieran aislados de la realidad, nunca he entendido ese tipo de condenas. Están muy cerca los acontecimientos del sismo que afectó a la Ciudad de México, ¿pero en algún momento deberá ser escrito, como pasó en 1985? Hay dos momentos: uno es el dramático, de la tragedia, pero siempre hace falta un segundo momento, que es la reflexión. Octavio Paz trató de hacerla después del 85 y lo que él dice es que una manera de capitalizar el esfuerzo de solidaridad es transformar el sistema político para que fuera menos centralista. Pero al mismo tiempo se hizo sin una reflexión de los peligros que traería. Un ejemplo es la enorme corrupción de (Javier) Duarte en Veracruz; lo malo de la descentralización es que ahora los gobernadores no tienen vigilancia. No todo lo que parece positivo, por sí mismo, no necesariamente terminará siéndolo, si se hace sin reflexión puede resultar mucho peor. En tu nueva novela, ¿qué figura representa la serpiente? La serpiente es tan solo un emblema, donde es la historia de un hombre que con enormes dificultades trata de reconstruirse. Es la historia de una reconstrucción pero no una reconstrucción de una ciudad, sino de la individualidad de una persona, de saber quién es. Le han arrebatado la memoria pero poco a poco va recordando cosas que ha vivido, como las grandes esperanzas del siglo pero al mismo tiempo en las grandes desilusiones.
La serpiente es un emblema, es la historia de un hombre que trata de reconstruirse”