DEJA DECISIÓN AL PARLAMENT
Presidente catalán se niega a convocar a comicios
l presidente catalán, Carles Puigdemont, rechazó convocar a elecciones anticipadas por la “acción vengativa del Estado” y porque nunca recibió las “suficientes garantías” de que el gobierno de España no aplicaría el artículo 155 para intervenir Cataluña si llamaba a comicios autonómicos, legalmente permitidos. Pero su decisión pone a la región mucho más cerca de ser controlada por el gobierno de Mariano Rajoy, del conservador Partido Popular, temiéndose que estallen fuertes protestas.
El presidente de la Generalitat (gobierno autónomo) prefirió que la mayoría del parlamento catalán decida cómo reaccionar ante la aplicación del 155. Los diputados locales votarán este viernes dicha decisión y no se descarta que se opte por la declaración unilateral de independencia de Cataluña.
Puigdemont hizo el anuncio en un discurso institucional de apenas ocho minutos, tras una mañana de infarto. En primer lugar, dio a entender que el gobierno de Rajoy aplicaría el 155 aunque convocara a elecciones. Asimismo, dijo que no obtuvo el “compromiso” del gobierno para “parar la represión”, en alusión al encarcelamiento de los líderes de las plataformas Òmnium y la Asamblea Nacional Catalana y el despliegue policial en Cataluña.
“El 155 es una aplicación fuera de la ley abusiva e injusta que busca erradicar no solo al independentismo sino a toda la tradición del catalanismo. No acepto estas medidas”, dijo Puigdemont, y recalcó que ofreció “sacrificios” para lograr el diálogo. “Pero una vez más comprobamos que la responsabilidad solo se nos exige a una de las partes”, lamentó.
Puigdemont fue más allá y consideró que las medidas del 155 “esconden casi sin disimular la intención vengativa de un Estado que se vio derrotado el 1 de octubre”, en alusión al ilegal referendo soberanista, donde solo participó cerca del 43 por ciento de los catalanes. Las medidas del 155, que el gobierno podría aplicar este mismo sábado una vez que el Senado las apruebe hoy viernes, incluyen el cese de todo el gobierno catalán y la limitación de las funciones del parlamento local. “A otros —concluyó Puigdemont en referencia al gobierno— se les permite su absoluta irresponsabilidad. Es la lógica de una política hecha a base de clamores como el ‘¡a por ellos!’ (grito con el que se animaba a la Guardia Civil y la policía cuando partían hacia Cataluña) en vez de una basada en el ‘con ellos’”.
La vicepresidenta del gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría, dijo que “hay que rescatar a Cataluña por mucho que algunos se empeñen en dejarla fuera de la ley”, al explicar la posición de su gobierno en la comisión del Senado para convalidar las medidas del artículo 155.
Sáenz recriminó a Puigdemont su inacción desde la aprobación el sábado del acuerdo de intervención de la autonomía: “Desde entonces no ha habido más que ruido y no lo ha provocado este gobierno, que ha estado en su sitio”. “Se han negado a dialogar. El diálogo se conjuga en gerundio, hablando. No le han faltado oportunidades pero Puigdemont ha faltado a todas y cada una de las citas a las que le ha invitado el gobierno, tampoco ha querido venir al Senado a explicarse”, afirmó la vicepresidenta.
Ante la actitud de “desgobierno” de los independentistas, Sáenz de Santamaría defendió la intervención de la autonomía como la fórmula para que el “viaje a ninguna parte del independentismo tenga que llegar a su punto de retorno”.
El Partido Socialista Obrero (PSOE) también defendió el 155 y llamó a Puigdemont a convocar a elecciones anticipadas en el marco de la legalidad, para “evitar el desastre del que Cataluña y España tardarán en recuperarse”.