HSBC paga 300 mde para evitar juicio por fraude
El banco fue acusado en los documentos llamados SwissLeaks de ayudar a sus clientes más ricos a evadir impuestos
HSBC acordó pagar 300 millones de euros a las autoridades francesas para llegar a un acuerdo sobre una investigación de largo tiempo sobre las acusaciones de que ayudó a evadir impuestos a los clientes ricos en su banca privada suiza.
La investigación sobre HSBC fue resultado de los datos sobre miles de clientes franceses de la banca privada suiza del grupo que Hervé Falciani, ex especialista en tecnología de la información del banco, entregó a las autoridades de París.
En un comunicado, la PNF, la Fiscalía Nacional Financiera, dijo que en el plan participaron más de mil 600 millones de euros en activos y que los hechos se “descubrieron como resultado de la incautación y aprovechando los documentos de las computadoras que se encontraban en el hogar en Francia de un antiguo empleado de HSBC en enero de 2009”.
De acuerdo con la PNF, el banco aceptó los hechos alegados del caso. HSBC dijo que “reconoció públicamente la histórica debilidad de control en la banca privada suiza en varias ocasiones y se toman pasos firmes para abordarla”.
Un fiscal francés familiarizado con el caso dijo: “Esto termina siempre y cuando el banco pague lo que tiene que pagar. Creo que lo harán muy rápido y entonces el caso se cerrará”.
Los datos de SwissLeaks (las filtraciones suizas) causaron revuelo a principios de 2015 docenas de medios de comunicación los publicaron, en estos se mostraba cómo HSBC ayudó activamente a muchos de su clientes de la banca privada a evitar a los recaudadores de impuestos en todo el mundo.
Falciani, a quien el Tribunal de Justicia Federal de Suiza declaró culpable el año pasado por “espionaje industrial agravado”, huyó de Ginebra con miles de archivos de clientes de HSBC que datan de 2006 y 2007. Dijo que buscaba dar a conocer personas sospechosas de evasión fiscal. Los datos cayeron en las manos de las autoridades francesas cuando revisaron su casa en el Sur de Francia en 2009 a solicitud de la fiscalía suiza después de que abandonó el país.
Stuart Gulliver, director ejecutivo de HSBC, se disculpó por los “acontecimientos inaceptables que ocurrieron en Suiza a mediados de los años 2000”, cuando los parlamentarios británicos lo interrogaron junto con su ex presidente, Douglas Flint, por la controversia. Gulliver también se enfrentó a cuestionamientos sobre por qué colocó millones de dólares de pagos de bonos en una compañía panameña a través de la banca privada suiza de HSBC.
HSBC recibió una multa de 40 millones de francos suizos por parte de las autoridades del país helvético en junio de 2005 por “fallos organizacionales” que permitieron que se pudiera llevar a cabo el lavado