Pasa reforma fiscal de Trump en Cámara baja
a Cámara de Representantes de Estados Unidos adoptó la reforma fiscal impulsada por el presidente Donald Trump, aunque hay incertidumbre sobre si sobrevivirá al voto del Senado, donde los republicanos tienen una exigua mayoría.
La Cámara baja, dominada por los republicanos, aprobó por 227 votos contra 205, el proyecto de ley que reduce los impuestos de las empresas y de los trabajadores a partir de 2018.
La oposición demócrata votó unánimemente en contra, al igual que 13 legisladores republicanos. “Votar esta reforma es lo más importante que podemos hacer para retomar la senda del crecimiento (...) y ayudar a las familias de clase media que les ha ido mal”, argumentó Paul Ryan, el presidente de la Cámara.
El proyecto de reforma reduce el impuesto a las ganancias corporativas de 35 por ciento a 20 por ciento, así como el impuesto a la renta personal.
Además, implicaría una gran simplificación del sistema tributario, con la eliminación de múltiples deducciones impositivas y la promesa, para 90 por ciento de los contribuyentes, de poder completar su declaración con “tarjeta postal”, en lugar de los software y contadores que la mayoría de los ciudadanos esta- dunidenses utiliza actualmente.
La votación se produjo poco después de que Trump se reuniera con la bancada republicana de la Cámara de Representantes, ante quienes se mostró “muy optimista” y a quienes urgió a apoyar el proyecto, según asistentes.
El legislador Don Bacon parafraseó el mensaje de Trump: “es la oportunidad que tienen de pasar de mediocre a excelente, hoy depende de ustedes”.
Pero la apuesta es más arriesgada en el Senado, con una estrecha mayoría republicana de 52-48 sobre los demócratas, que deberá votar en diciembre.
Ron Johnson se convirtió el miércoles en el primer senador republicano en oponerse a la iniciativa, advirtiendo que desgrava en forma importante a las corporaciones, mientras que los negocios más pequeños, en los que los propietarios pagan impuestos “cruzados” individualmente, son tratados de manera diferente. “Si la pueden aprobar sin mí, háganlo”, declaró Johnson al diario neoyorquino TheWall StreetJournal, y agregó que el proyecto beneficia injustamente a las grandes corporaciones más que a otro tipo de negocios.
Los legisladores demócratas criticaron frontalmente la propuesta por considerar que favorece de manera mayoritaria a las rentas más altas. “Se ensaña con la clase media y aquellos que aspiran a ella. Es un pillaje y un saqueo a la clase media”, afirmó Nancy Pelosi, la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes.
Aunque los legisladores planean votar siguiendo líneas partidistas, los republicanos solo pueden afrontar dos disidentes en la Cámara alta. Si tres senadores de esa bancada se oponen, la iniciativa fracasa.
El mandatario republicano escribió en Twitter que los demócratas estaban “luchando contra un gran recorte de impuestos para la clase media y los negocios medianos” por una razón: “obstrucción y demora”. m