Llaman a definir plan ante fin a neutralidad de la red
Ante la decisión de Estados Unidos de aprobar una nueva norma que elimina la llamada neutralidad de la red, ahora México deberá empezar a definir su estrategia sobre el tema, aunque debe tener muy claro que no puede seguir el camino de Washington, afirmó Jorge Fernando Negrete, director general de Mediatelecom Policy & Law.
México se encuentra en una situación complicada ante dicho tema, pues tiene la disyuntiva de ser un país que está en Norteamérica y renegocia un tratado de libre comercio con Estados Unidos, pero al mismo tiempo es parte de América Latina y no tiene cobertura ni convergencia completa en el mercado, añadió.
“El tema de la neutralidad tiene que ver con la expansión de las redes, con la innovación y contar con convergencia total, por eso Estados Unidos tomó esa decisión; ellos ya tienen total cobertura, su mercado es mucho más maduro, tienen empresas en internet, pero además hay competencia entre los operadores”, explicó Negrete.
Dijo que si bien el tema no es para rasgarse las vestiduras, aun cuando algunos internetólogos —quienes están totalmente a favor de la neutralidad— se van a tirar al piso, en realidad no sucederá nada grave en la industria.
Lo anterior debido a que el impacto internacional fue mitigado con el hecho de que la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por su sigla en inglés), dejó los temas de competencia a la autoridad de competencia local, lo cual dejó abierta la puerta para que todos los países regulen, desde su propia autoridad, este tema. Para Maersk Line, la naviera con la mayor flota de contenedores a escala global, la falta de infraestructura en algunos puertos y la inseguridad son los retos para el desarrollo del comercio marítimo en México, sostuvo Soren Toft, director general de operaciones de la empresa.
Entrevistado por MILENIO en el contexto de una gira de trabajo por América Latina, comentó que en México se reporta un crecimiento alto y que se necesita este ritmo de avance, aunque destacó que hay algunos retos de infraestructura en la costa este, como Altamira y Veracruz, donde no se tiene capacidad para atender embarcaciones de tamaño mediano con contenedores.