Milenio Monterrey

Lo que ve el que vive

Elba Esther Gordillo se hizo cargo de ofrecer al mundo la imagen de una mujer deshonesta que manejaba un sindicato enorme a su antojo, con todos los dineros a su disposició­n; si hubiera unos sinónimos de antidemocr­acia, autoritari­smo y corrupción, sería e

- HÉCTOR TÉLLEZ/ARCHIVO Hay al menos una posibilida­d de que Liópez devuelva la SEP a la familia de La Maestra. Gils’enva

il recordaba el título de Garibay mientras leía sus periódicos: Lo

que ve el que vive. Gil no sabe mentir: nunca pensó que vería a Liópez aliarse, buscar sombra, seguidores y votos con Elba Esther Gordillo y su familia. Gamés se llevó los dedos índice y pulgar al nacimiento de la nariz y hesitó: ¿los honestos pueden hacer alianzas con los deshonesto­s ante los ojos del mundo sin que nada pase? La pregunta parece ingenua, los es, pero no por eso es menos pertinente. Liópez ha hecho de sí mismo todos los autoelogio­s: soy el más honesto de los honestos, “no me van ha encontrar nada”, salvo unas alianzas con un grupo de cuatreros.

Por otro lado, o del mismo, la maestra Elba Esther Gordillo se hizo cargo de ofrecer al mundo la imagen de una mujer deshonesta que manejaba un sindicato enorme a su antojo, con todos los dineros a su disposició­n. Si hubiera unos sinónimos de antidemocr­acia, autoritari­smo y corrupción, esa sería La Maestra Milagro

sa. Y el candidato que afirma que si gana la Presidenci­a, la corrupción desaparece­rá pacta con uno de los más oscuros personajes del México corrupto.

A Gil le va a dar algo. ¿Quién le va a explicar esto a Gilga? Tendría que ser alguien conspicuo, digamos Rafael Barajas,

El Fisgón; o bien, don Luis Hernández Navarro, director de opinión de su periódico La Jornada: don Luis, unas palabras al respecto. Por cierto: oigan, ya: dejen que El Fisgón dirija el periódico porque al paso que vamos Carmen Lira cumplirá más años al frente de La Jornada que Porfirio Díaz en el poder. El Fisgón, por cierto, lo haría mil veces mejor que Carmen Lira, más periodista, más historiado­r, más culto. En fon. Pero no nos detengamos en naderías. Sin ambages También se le podría pedir una opinión acerca de esta hermosa coincidenc­ia política a Cuauhtémoc Cárdenas. Ingeniero: ¿cuál es su opinión de la alianza de la maestra Gordillo y su familia con LiópezMore­na-PT-MC-PES? ¿Qué diría El Tribuno Porfirio Muñoz Ledo? Nada, qué va a decir, si le aceptó chamba a todos los presidente­s, empezando por Díaz Ordaz. ¿A quién más se le podría pedir una opinión? Veamos, de tin-marín-de-do-pingüé: ¡Epigmenio Ibarra! Epi, haga usted un anuncio muy efectivo para convencern­os de que esta unión vale la pena, pues le trae, como los vagoneros de la política, a Elba Esther bañada en el río de la pureza. Un grito desgarrado­r rompió el silencio sagrado del amplísimo estudio: Ay, mis hijos cínicos, desvergonz­ados.

Como en todas las notas malhechota­s, ésta no ha puesto por delante la informació­n. Veamos: en Zacatecas, la familia de Elba Esther Gordillo, o sea su nieto Fujiwara y su yerno González Sánchez, le han organizado a Liópez un acto, bastante bien puesto por cierto, a través de las Redes Sociales Progresist­as ( gran nombre), el magisterio o una pequeña y muy activa parte de él, reunió a maestros de Chiapas, Hidalgo, Nayarit. Líderes sindicales que dieron su respaldo a Liópez. La nota de El Universal escrita por Misael Zavala cuenta: “Con un chaleco blanco con las iniciales ‘AMLO’ en la espalda, González Sánchez recibía a los dirigentes”. Liópez dijo en su discurso: “Cancelar la mal llamada reforma educativa, lo digo así de manera categórica y sin ambages, para que quede claro, es un compromiso”. Aigoeei. ¿Cómo la ven? Dicho esto sin la menor intención de una albur educativo.

Rafael Ochoa

Gil se frotó los ojos. Liópez y Rafael Ochoa hombro con hombro. Ochoa fue el dirigente del SNTE y confirmó el respaldo de un sector del magisterio a la precandida­tura de Liópez. ¡Manchen! Ochoa: secretario, golpeador, mayordomo, bolsa de golpeo y lo que usted quiera y mande de Elba Esther Gordillo, el operador de todas las trapacería­s de La Maestra.

Gilga recuerda que La Maestra atendía en una mesa del café Balmoral del Presidente Chapultepe­c. En la mesa, Gordillo tenía tres celulares y atendía a la vez tres asuntos o más. En algún momento preguntaba a uno de los cinco secretario­s que la seguían a sol y sombra: ¿Y Ochoa? Traigan a Ochoa. Y cuando el dirigente del magisterio llegaba, La Maestra le regalaba unos insultos que Ochoa recibía con resignació­n. Rafael Ochoa con Liópez: mecachis. Hay al menos una posibilida­d de que Liópez le devuelva la SEP a la familia de Elba Esther Gordillo. En fon. Lo

que ve el que vive. Gil les recuerda: todos ustedes tienen que ver más bax.

Todo es muy raro, caracho: como diría Diógenes. Cuánto más conozco a la gente, más quiero a mi perro. m

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico