Jóvenes de Florida se movilizan contra las armas de fuego
Sobrevivientes de la matanza del 14 de febrero en la secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, Florida, han comenzado a denunciar el acceso fácil a las armas de fuego en Estados Unidos y llaman a una gran movilización el 24 de marzo en la capital y en otras grandes ciudades del país, luego de que el ex alumno de su liceo Nikolas Cruz abriera fuego en los pasillos del centro educativo matando a 17 personas.
Cruz compró un fusil semiautomático AR-15 pese a las numerosas alertas recibidas por varias agencias, entre ellas el FBI, por su comportamiento violento. Cruz había sido expulsado un año antes del liceo.
Según el periódico LeMonde desde Washington, los estudiantes del liceo de Parkland decidieron, después de dos días de reuniones, convocar a la gran manifestación para reclamar un control más estricto sobre armas de fuego.
Bajo el lema “Marcha por nuestras vidas”, la movilización busca “pedir que una propuesta de ley integral sea presentada de inmediato al Congreso” para resolver “los problemas de vio- lencia a causa de las armas que se han generalizado en nuestro país”, según el sitio de internet dedicado a la manifestación y citado por el vespertino francés.
Otra marcha hacia la sede del parlamento de Florida tendrá lugar hoy. Los alumnos quieren interpelar a los legisladores del estado para que revisen las leyes sobre salud mental y armas a fin de hacer más difícil su compra para las personas con antecedentes psiquiátricos.
Trump pide prohibir “alteración” de fusiles
Ante la ola de indignación generada por el sangriento tiroteo del 14 de febrero en Parkland, Florida, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, propuso prohibir un dispositivo para armas que fue usado en 2017 en Las Vegas para provocar una masacre.
Respaldado por la National Rifle Association (NRA), el poderoso lobby de las armas de fuego, el presidente intenta equilibrar un tema candente. Al evocar el tiroteo de Las Vegas, que causó la muerte de 58 personas en octubre, Trump anunció ayer que había pedido al Departamento de Justicia prohibir los dispositivos conocidos como bumpstocks, empleados por el asesino de Las Vegas, que permiten a un fusil disparar ráfagas semiautomáticas.