Se suicida presunto atacante de Austin
Policía de Texas dice que Mark Conditt confesó sus "bombazos" en un video
un hombre blanco, presunto autor de una serie de atentados con bombas en Texas, se inmoló cuando la policía iba a arrestarlo poniendo fin a semanas de tensión en esta entidad del sur estadunidense.
La policía rodeó al hombre, identificado como Mark Anthony Conditt, de 23 años, ante un hotel en las afueras de Austin, capital de Texas. Los ataques que comenzaron el 2 de marzo en esa ciudad dejaron dos muertos y varios heridos.
El sospechoso murió luego de detonar un dispositivo en su automóvil, dijo el jefe de policía de Austin, Brian Manley, en una conferencia de prensa tras el dramático final de la persecución que llevaban a cabo cientos de agentes federales y locales.
Conditt dejó una confesión grabada en un video antes de morir, afirmó Manley. El jefe policial aseguró que el sospechoso no hizo alusión “en ningún momento” del video a motivaciones de odio o terrorismo.
Bajo el punto de vista del atacante, las bombas serían “el grito que un joven debe hacer para afrontar los retos de un hombre en la vida”.
En el video, que dura unos 25 minutos y que Conditt grabó la noeche del martes, también proporciona detalles sobre cómo elaboró “siete bombas” con un mismo mecanismo, así como las diferencias entre cada una de ellas.
Manley lanzó un mensaje tranquilizador al explicar que las siete bombas de las que habla Conditt están localizadas: cinco estallaron, provocando la muerte de dos personas; una fue interceptada antes de explotar y la última es aquella con la que se quitó la vida la madrugada de ayer.
La policía cerró el cerco sobre el sospechoso, supuesto responsable de las cinco explosiones, las últimas ocurridas de 24 a 36 horas antes, gracias a grabaciones de video y testimonios, dijo Manley. El gobernador de Texas, Greg Abbott, presente en la conferencia de prensa, quiso ensalzar la labor de las autoridades policiales que “evitaron que el número de víctimas fuera a mayores con su excelente trabajo”. Abbott envió sus condolencias a las familias afectadas y se refirió a Conditt como “una persona con muchos problemas personales”.
Agentes federales encontraron varios explosivos caseros y los componentes necesarios para fabricar bombas en el domicilio en el que residía el atacante en serie en la localidad de Pflugerville, un suburbio de Austin.
El agente especial de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés), Fred Milanowski, aseguró con “un alto grado de certeza”, según medios locales, que los componentes encontrados en la vivienda son los mismos que se emplearon “en todas las bombas detonadas en Austin desde principios de marzo”.
Uno de los factores que más desconcertó a las autoridades durante la investigación fue el grado de sofisticación de los artefactos, por lo que Milanowski dijo que seguirán buscando pruebas para averiguar cómo aprendió Conditt a fabricar las bombas.
Si la gente ve paquetes o bolsas sospechosas, que llame al 911, pidió Milanowski.
En la mañana de ayer, la familia del sospechoso publicó un comunicado, difundido por la cadena de noticias CNN, en el que declaraban estar “devastados y destrozados por la noticia”.
El presidente estadunidense, Donald Trump, felicitó a la policía a través de su cuenta de Twitter: “EL SOSPECHOSO DE LAS BOMBAS EN AUSTIN ESTÁ MUERTO. ¡Gran trabajo por parte de las fuerzas del orden público y todos los concernidos!”
Sin embargo, aún se desconoce el motivo de las explosiones. Tampoco se sabe si tenía cómplices o si dejó otras bombas colocadas. “La investigación continúa porque todavía hay preguntas pendientes”, dijo el alcalde de Austin, Steve Adler.
La filial de la cadena CBS en Austin, KEYE, divulgó imágenes que dijo eran del sospechoso, tomadas de cámaras de vigilancia. Se le veía luciendo una gorra azul de béisbol, guantes y posiblemente una peluca mientras dejaba paquetes en un local de la empresa de mensajería FedEx el domingo.