“Nos vemos mañana”, dice Puigdemont casi libre

a justicia alemana decretó la libertad bajo fianza para el ex presidente catalán Carles Puigdemont y desestimó que pueda ser extraditado a España por rebelión, un revés para las autoridades españolas. “Nos vemos mañana. ¡Muchas gracias a todos!”, reaccionó en Twitter Puigdemont, detenido desde el 25 de marzo en la prisión de Neumünster, en el norte de Alemania, de donde se espera salga hoy. El tribunal del estado de Schleswig-Holstein decidió seguir examinando la petición de extradición de España, pero rechazó la principal acusación que aparece en la orden de detención europea recientemente reactivada por Madrid.

Así, la corte alemana considera que los hechos de “rebelión” de los que se acusa a Puigdemont por la organización del referendo sobre la independencia de Cataluña en octubre no pueden mantenerse en virtud del derecho alemán, pues eso implicaría que Puigdemont fuera directamente responsable de hechos de violencia.

Solamente el delito de malversación de fondos públicos, que supuestamente habrían sido destinados a organizar el referéndo ilegal de independencia, con un costo de 1.6 millones de euros, puede ser atendido para una posible entrega a España, explicó el comunicado judicial.

La jurisdicción consideró que esos cargos son demasiado débiles como para justificar su mantenimiento en detención, por lo que ordenó la puesta en libertad de Puigdemont bajo control judicial y fianza de 75 mil euros. El tribunal pidió a la justicia española que le proporcione más elementos para un examen más detallado de la solicitud de extradición por malversación de fondos.

Puigdemont tendrá prohibido abandonar Alemania, a la espera de una decisión final, y deberá presentarse una vez por semana en una comisaría.

La sentencia también supone un revés para la fiscalía alemana, que el martes pidió mantenerlo detenido por “alta traición”.

Mientras, la justicia belga dejó ayer en libertad a tres ex ministros de Cataluña contra los que España emitió órdenes de detención europea por su papel en la fallida declaración de independencia de 2017.

Meritxell Serret, Antoni Comín y Lluís Puig, antiguos miembros del ejecutivo de Puigdemont, se presentaron ante la policía belga para responder por la orden de arresto europea que la justicia española emitió en su contra en marzo y fueron comunicados de la decisión.