Inseguridad: mal de muchos, consuelo de Fasci…
Las últimas semanas han sido de números inusuales en la seguridad. Han vuelto las ejecuciones múltiples, con cadáveres en todos los puntos cardinales de la ciudad y a veces hasta en todos los penales con cuerpos desmembrados.
San Pedro Garza García tampoco está exento de este desbordamiento de las bandas del crimen organizado, ya que el famoso blindaje del que tanto presumía el ex alcalde Mauricio Fernández fue roto de nuevo en la recién estrenada gestión de Miguel Treviño.
Y mientras a nivel nacional comienzan a ocurrir cosas interesantes, con la Secretaría de Seguridad que se encarga de captar y analizar el reporte de los homicidios diarios en todo el país y afrontarlos con la división del territorio nacional en 150 zonas de atención, en Nuevo León nada pasa.
La nueva reclasificación por estados del gobierno federal entrante ubica a Nuevo León en el lugar 23 en el número de homicidios, con un promedio de 11 muertes por cada 100 mil habitantes.
Pero en cuanto a nivel de violencia, el estado que gobierna Jaime Rodríguez representa uno de los focos rojos en el país, junto con Guanajuato, Jalisco, Tamaulipas, Veracruz, Jalisco y Puebla, de acuerdo al análisis del secretario de Seguridad, Alfonso Durazo.
La llegada de Aldo Fasci como secretario de Seguridad estatal no parece haber reflejado un cambio, salvo por la franqueza y la tranquilidad con la que asume que Nuevo León enfrenta de nuevo una crisis de violencia extrema.
De nada sirve que Fasci explique que las bandas criminales se están peleando entre ellas, como para poner a salvo a los civiles que él debe cuidar por ley, si esa supuesta explicación de la realidad no va de la mano con una estrategia para combatir a los delincuentes.
No debe olvidar que dirige una fuerza de casi cinco mil policías muy bien armados y los ciudadanos esperan resultados. Mal de muchos, consuelo de Fasci…