“Actuar, jamás por mi timidez; cantar, solo bajito y en el karaoke”
La célebre productora televisiva afina detalles de la inauguración de su escuela de actuación y confiesa que desairó a Ignacio López Tarso para acompañarlo en una obra de teatro
Carla Estrada está a la espera de que su más reciente historia, la biopic de Silvia Pinal, tenga fecha de estreno, pero mientras tanto la inquieta productora se ocupa de los detalles de lo que será su escuela de actuación.
Después de tantos años de producir, reconoce que jamás le dio por actuar y siempre prefirió estar detrás o manejando las cámaras, “porque lo tímido” jamás se le ha quitado, pero cree que es momento de apoyar a los nuevos talentos y aplicar los conocimientos adquiridos.
Además, como suele pasar desde hace algunos años, cuando los foros o alguna locación no ocupan su día, se da tiempo de disfrutar a su hijo, su familia, su ca- sa y, por supuesto, de convivir con sus amigos, que aunque reconoce no son muchos “porque no es fácil hacer amigos”, sí tiene los suficientes para compartir el karaoke o reuniones en casa.
Con la escuela, ¿te estás estrenando en una nueva faceta, ahora como empresaria, o cambiarás de giro y dejarás la producción de televisión?
No, la idea de la escuela es un proyecto que ya tenía tiempo, pero hasta ahora se dieron las cosas para que todo empatara. Es un negocio con varios socios (Pedro Montiel, Gerardo Miranda). Alberto Estrella y Víctor Carpinteiro la van a dirigir. Obvio yo estaré participando. Ahora estamos viendo los programas de estudio. Tendremos grandes maestros, como Olivia Gorra, que dará clases de canto; Angélica Aragón y Emoé de la Parra. La escuela está en Plaza de las Estrellas y la abriremos el año que entra.
Pero no es que cambie de giro, más bien es como salir de mi zona de confort y asumir una gran responsabilidad social y cultural, donde dices “todos estos años he aprendido y podido crecer”, pero también hay que hacer crecer a la gente, darles la posibilidad de que se preparen en una escuela donde tendremos muchas clases, y será una opción para gente joven, pero también gente adulta que no ha tenido la posibilidad de estudiar y lo quiere hacer. Y como empresaria no es algo nuevo, porque hace algunos años tuve mi perfume, mis maquillajes y me fue muy bien.
¿Esta nueva empresa ocupará tu tiempo por completo, como cuando estás produciendo alguna novela?
No, no del todo.
¿Qué haces en tu tiempo libre? Me gusta meditar y tomar cursos de superación personal. Estar con mi hijo, con mi mamá, con mis amigos. ¿Has sido buena mamá?
Eso se lo tendrías que preguntar a mi hijo, aunque creo que ninguna mamá llena las expectativas de los hijos. Yo trato de estar presente, estar con él en sus momentos más importantes. Ahora está triunfando con su propia luz, lo cual me da mucho gusto, está haciendo su carrera como director en Los Ángeles.
¿Eres amiguera?
No, no mucho, tengo pocos, porque no es fácil hacerlos, pero los que tengo son grandes amigos y me divierto mucho con ellos. Me gusta hacer reuniones en mi casa, porque casi nunca tengo tiempo de estar ahí, cuando no tengo producción. Me gusta hacer cenas y karaoke.
¿Te gusta cantar?
Me divierte. Pero no lo hago sola, siempre estoy con Yahir o con Sergio Gabriel, y como él canta peor que yo, pues ya no se nota; además canto bajito.
¿Qué cantas?
Pues las de Daniela Romo, José José, Timbiriche...
¿No te gusta actuar después de tantos años de producir telenovelas y trabajar con actores? ¿Nunca te dio por probar suerte en ese terreno?
No. Jamás, soy muy penosa, estar detrás de cámara o dirigirla sí, lo disfruto muchísimo, pero actuar jamás, desde niña fui muy tímida y nunca se me quitó, no me siento segura, me dan nervios, me impactan las cámaras y los micrófonos. Imagínate: un día Ignacio López Tarso me invitó a hacer una obra (Un Picasso), la que hizo con Aracely Arámbula, pero le dije que no, que para nada, cómo me iba a parar junto a él en el escenario; además, pensé que era un personaje que decía un diálogo, pero era una obra de solo dos personajes. No, definitivamente le dije que no podía hacer eso.
“Mi reto más grande es formar una familia y mi producción más grande ha sido mi hijo”
A lo largo de tu carrera hay infinidad de títulos, como Amor real, Quinceañera y Sortilegio, ¿cuál es la producción que más trabajo te costó?
Mi reto más grande es formar una familia, mi producción más grande es mi hijo y es lo que más trabajo me ha costado, cuando metes el corazón de madre o de hija, es bien complicado, porque las cosas ya no son tan fáciles; el trabajo aunque lo quieras, lo ames, es trabajo, es mucho más fácil tomar decisiones que en la parte personal. Unir tu familia con el trabajo es bien difícil, soy una mujer latina que siempre siente que necesita dar más y trato de hacerlo, pero si educas y trabajas con culpa, entonces tienes que trabajar para quitarte esas culpas, sobre todo cuando sabes que eres la que tiene que sacar adelante a los tuyos, en mi caso, a mi hijo. Pero hasta ahora lo he logrado.