Pobre Tv Notas, pobres de nosotros
Estos días, cuando pasa algo tan estúpido y barato como el “pleito” entre Alfredo Adame y Carlos Trejo, la gran mayoría de las redacciones de habla hispana no se puede dar el lujo simplemente de ignorarlo, y me temo que TODOS somos responsables. Sí, usted. El médico o el estilista que pone esas revistas de chismes en su sala de espera, o también tú, que tapas el nuevo paparazzi de Ninel Conde con tu periódico de izquierda en el Metro. Incluso los que por años hemos decidido no comprar esas cosas no podemos negar que nuestra naturaleza humana nos hace, al menos, echarle un ojo a la portada. Ni modo, somos seres medio horribles en ocasiones.
Pues ahora todo ha cambiado. Claro, uno puede decidir cómo toma la historia de la supuestas “pelea” entre estos dos personajes como sátira, cinismo o escandalizado morbo. Pero la nota ahí va a estar. Porque sino,eldealladolavaatener.¿Yquécreen?Esassiempre son las notas más leídas. Siempre.
No estoy haciendo una apología del hecho. Simplemente estoy observando una vez más cómo se está repitiendo la historia mediática.
¿Recuerdan los tiempos de Ciudad Desnuda y Duro y directo?, yo sí. Demasiado bien, estaba en Tv Azteca en los tiempos que el rating (aunque definitivamente no el prestigio) llegaba a través de la sangre, el morbo, el chisme desmedido. Y no. Ahí tampoco había quien controlara a los productores si daban resultados.
Claro, hasta un día que llegó una llamada de Presidencia a ambas televisoras y todo acabó de la noche a la mañana. Pero pasaba, pasó y seguirá pasando, solo queahoraustedes,lectoresqueridos,sonaúnmásresponsables que nunca.
¿Esos productores que empujaban por más y más sangre? Pues ahora somos todos nosotros con cada clic. Y como no hay nada que comprar y sentimos que nadie se dará cuenta, pues nos damos el gusto de meternos al chime impunemente, pensamos.
No nos importa, aunque podamos sospechar, que los susodichos o se pudieron poner de acuerdo para estar en los titulares y así promover algo o que simplemente estamos viendo a dos hombres mayores comportarse como… dejaré los insultos para ellos, que lo hacen muy bien.
Por los que sí siento un poco de pena es por los reporteros de los medios que siempre comerciaron con esto.Ahoraestáncompitiendoconunmontóndegatillosrápidosenunaredacción,milesdeellas,quenotienenquehacerpaparazzis,reportear,negociaruhostigar a nadie. Solo suben lo que les llega y a lo que sigue. ¿Cómo competir con eso?
Metemoquelarespuestaes:conalgopeor.Condesesperación. Con esperanza de que esto sea una moda y simplemente pase. Pero eso nunca ocurrió con sus publicaciones y no va a pasar en la red. Y con nuestra identidaddigitalsiendodefinidaconcadaactoquehagamos en la red, me temo que ahora somos a lo que le damos clic. ¿Les gusta la persona que son en el cibermundo? Porque esto solo se va a poner más rudo.
Siento un poco de pena por los reporteros de los medios que siempre comerciaron con esto