Elizabeth Warren va contra “saqueo de Wall Street”
Iniciativa de ley. Los “saqueadores” del título señala a fondos de capital privado, inversionistas especializados, que compran empresas usando grandes cantidades de deuda
Elizabeth Warren, la senadora estadunidense del Partido Demócrata, publicó un proyecto de ley con el llamativo título de “Ley para detener el saqueo de Wall Street”. ¿Suena un tanto ligero? Bueno, en realidad es muy serio.
Los“saqueadores” del título son los fondos de capital privado, inversionistas especializados que compran empresas utilizando grandes cantidades de deuda. Alguna vez una actividad minoritaria, el capital privado tuvo un enorme crecimiento en las últimas cuatro décadas en ambos lados del Atlántico. Ya en 2017 había alrededor de 8 mil empresas de propiedad del capital privado en EU. Eso es casi el doble de las que cotizaban en bolsa.
La forma en que logró esta expansión se encuentra en el corazónde la historia. Los ejecutivos de capital privado insisten en que sus prácticas se han extendido porque manejan mejor estas empresas. Es posible que eso pueda ser cierto en algunos casos, tal vez muchos. Pero hay un lado más cuestionable del sorprendente crecimiento de la industria de compras parecida a la de los Trífidos.
Se deriva de la forma como se estructuran los acuerdos de capital privado. Cuando las empresas de compras adquieren una empresa, financian la transacción principalmente con dinero prestado. Esto luego se traslada a la compañía de cartera, que tiene que pagar esas pesadas deudas.
El resultado es una empresa que puede ser más ágil debido a la llamada “disciplina de la deuda”. Hay que recordar, la ingeniería financiera es una habilidad fundamental para el capital privado. Pero también es mucho menos resistente a las crisis de las empresas o a los problemas de idiosincrasia. Su principal recurso cuando pegan estos problemas simplemente es vender activos, reducir el número de empleados o reducir el monto que invierte la empresa.
El mayor problema de Warren es con los incentivos que impulsan este ejercicio. Al elevar los niveles de endeudamiento, los expertos en compras aumentan el interés sobre la opción de compra que re
presentalapropiedaddecapitalde cualquier empresa. Esto les da un incentivo para mover la garantía para que quede fuera del alcance de los acreedores, ya sea mediante el cobro de fuertes comisiones por actividades marginales como el
“monitoreo” o la extracción de activos en forma de dividendos apalancados. Si el trato al final florece; genial. Pero si no ocurre, bueno, ellos también están bien.
El capitalismo de“Cara, yo gano. Cruz, tú pierdes” talvez es grandioso para los expertos de adquisiciones,alentandoaquesepaguenprecios cada vez más extravagantes por sus objetivos. Pero perjudica a contribuyentes que deben cubrir los costos sociales de los cierres. Y los que más pierden son empleadosyjubilados,quenotienenlacapacidad
de diversificar su exposiciónal juego financiero en marcha.
La preocupación es que el capital privado preside un abuso sistémico de responsabilidad limitada. Con certeza de que sus propios inconvenientes están limitados a su contribución de capital, los jefes de compras no tienen en cuenta los estragos que crean para los demás.