Milenio Monterrey

Última inspección se hizo en 2016

- VICTORIA FÉLIX MONTERREY

Las últimas actas de inspección a las unidades de Ecovía datan del 2016, a partir de entonces no existe registro de nuevas revisiones, señaló la organizaci­ón civil Únete Pueblo.

Rocío Montalvo, vocera de la organizaci­ón, explicó que solicitó informació­n a la Secretaría de Desarrollo Sustentabl­e (Sedesu) del estado sobre las condicione­s de las unidades antes y después de que requisaran el servicio, pero no existe dicho registro.

“No han hecho ningún tipo de revisión ni ningún tipo de auditoría, nada. La informació­n está solicitada hasta junio del 2019 y esto (hasta 2016) es lo único que existe”, dijo.

Lo anterior toma especial relevancia al considerar que hasta septiembre del 2016, la situación de la flotilla era grave: las 80 unidades presentaba­n al menos una falla física o mecánica.

Reportes de las últimas fichas de inspección revelaron que de enero a septiembre del 2016, un total de 890 recorridos no fueron concluidos por fallas: un 50 por ciento de los casos fue por calentamie­nto del motor; 18.8 por ciento por las llantas; 11.56 por ciento porque la unidad ya no avanzó; 8 por ciento por las puertas, entre otras cosas.

Esto se traduce a que durante ese año, un promedio de 74.16 viajes por mes fue suspendido por fallas en las unidades.

Aunque no existen fichas de inspección recientes, MILENIO Monterrey corroboró con un recorrido y testimonio­s de los usuarios que las fallas siguen presentes en las unidades.

Tras permanecer una hora en la estación Valle Soleado, donde

cerrada._ termina el recorrido de la Ecovía, se constató que 36 unidades tenían la tapa trasera levantada para evitar el sobrecalen­tamiento del motor, mientras que otras cinco traían la tapa

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