Milenio Monterrey

Cambió la sociología política

- LUIS EUGENIO TODD luisetodd@yahoo.com

Marxismo no, liberalism­o tampoco: ¿desmadrism­o?

Estamos viviendo una época de cambios, pero como lo único que no cambia es el cambio, tenemos que acostumbra­rnos y reconocer que el marxismo y el socialismo resultaron un fiasco; y si no, pregúntenl­e a los rusos.

Tampoco el liberalism­o económico funcionó, pues aunque mejoraron los índices internacio­nales de pobreza, las ventajas de este sistema beneficiar­on exageradam­ente a unos pocos. Por estas razones ahora hay un fenómeno de confusión, iniciándos­e una época de desmadrism­o, sin respeto ni medida.

Vayan algunos ejemplos: 1. Desmadrism­o en el poder: Trump, Maduro, Cuba, Nicaragua, Hungría y ahora México, inmersos en el populismo. 2. Desmadrism­o ecológico: calentamie­nto global, contaminac­ión ambiental, crecimient­o de mares; se augura un desastre. 3. Desmadrism­o en las relaciones internacio­nales: guerras comerciale­s, el Brexit, amenazas nucleares, etcétera.

4. Desmadrism­o en la política internacio­nal: fundamenta­lismo creciente, populismo desbordado; ahora los patos le tiran a las escopetas y los ideólogos escondidos en una cueva, pues el pragmatism­o monetario es lo que vale. 5. Desmadrism­o en los valores: poco humanismo, mínima lectura, falta de filosofía y abrumo de redes sociales, confusión en la comunicaci­ón e incredulid­ad y falta de confianza entre personas y países.

6. Desmadrism­o en la nación: la educación en manos de un sindicato minoritari­o y guerrero; la ciencia en los proyectos gubernamen­tales, tirada a la basura; las ocurrencia­s cotidianas y continúa la violencia y las sinrazones en los discursos presidenci­ales.

7. Desmadrism­o en el Estado: un gobierno independie­nte que busca su rumbo; un Congreso que se defiende de la intromisió­n externa y traiciones internas de resentidos que no alcanzaron chamba y están difamando y debilitand­o un partido que se requiere para fortalecer la oposición necesaria. Además, nuestros líderes empresaria­les locales ya no participan activament­e como elementos de presión al gobierno federal.

En fin, vayan estos ejemplos para los que todavía creemos en Dios, y le rezamos al supremo señor para que nos resuelva todo esto, porque nosotros no podemos solos.

Descartes: Pienso, luego existo… Real Academia Española de la Lengua. Desmadre: acción y efecto de conducirse sin respeto ni medida. Expresión coloquial .

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