La reforma fiscal que el país necesita

En la columna de la semana pasada mencioné que había dos puntos claves para que México tuviera un buen desarrollo económico en el corto y mediano plazo, el primero de ellos era certeza jurídica para los inversores; el segundo, una reforma fiscal que permita fortalecer el marco fiscal, mejorar la transparencia y la rendición de cuentas. Esta semana me quiero enfocar en este segundo punto. Para nadie es un secreto que México ha arrastrado durante años un serio problema en materia de recaudación fiscal, somos el último lugar entre los países de la OCDE en este rubro. El promedio entre dichos países es de 34.2% del PIB; mientras que en México es de tan solo 16.1%. Ya desde el año pasado, las principales calificadoras como Moody’s y S&P señalaban que la calificación de la deuda soberana de México dependería en buena medida de que el gobierno impulsara una reforma fiscal que diera certeza a los inversores y un marco de sana competencia. Recientemente, la Secretaría de Hacienda y Crédito Publico (SHCP) señaló que ya se está delineando dicha reforma y se espera que empiece a tomar forma después de las elecciones de junio. Además, el titular de esta dependencia señaló que no se pretende crear nuevos impuestos ni aumentar los ya existentes, sino desarrollar mecanismos para facilitar el cumplimiento de los contribuyentes; un gran reto si pensamos que la tasa de informalidad que hay en nuestro país es de las más altas en el mundo. En principio, las señales que envía la SHCP y el SAT son alentadoras; sin embargo, habrá que ver en qué termina la reforma. Me preocupa principalmente que el gobierno en su papel de Robin Hood termine por cargarle la mano a la plana productiva actual, lo cual tendría como resultado menor competitividad y en consecuencia la salida de inversiones. La reforma es un gran reto y los involucrados tendrán que hilar muy fino para hacer los cambios necesarios sin acarrear consecuencias negativas para el desempeño económico del país; de lograrlo nos espera un futuro interesante, ¿lograremos alcanzar la reforma fiscal que el país necesita? ¿Qué opinas al respecto?

Federico D’Kuba es profesor del IPADE Business School

Descartes: Pienso, luego existo… Los candidatos a gobernador deben proponer cosas realistas, no sueños, y menos utilizarlos para engañar a los electores con cosas posibles de corregir, pero no de suprimir.