Hay al menos 18 rutas en peligro de desaparecer en NL
Esta situación se suma a las 56 camioneras que ya no operan en la metrópoli
El servicio de transporte que hay en Nuevo León es insuficiente y la situación podría agravarse en el corto plazo, ya que hay al menos 18 rutas urbanas en peligro de cerrar, sumadas a las 56 que ya desaparecieron, informó la Asociación de Transporte Público de Pasajeros.
Esto debido a las deudas que enfrentan las empresas, lo que les impide renovar las unidades cada 10 años.
En los mejores tiempos, las rutas renovaban su flotilla cada cinco años y así incrementaban el número de unidades. Ahora ninguna de las 83 empresas transportistas en funciones tiene planes de renovación de flotilla, ya que ninguna es sujeta de crédito ante ninguna entidad financiera.
Lo anterior ha impactado también a los fabricantes de unidades que están desde hace meses en paro técnico y de reactivarse demorarían hasta seis meses en cumplir con un pedido de 100 unidades, ya que es el tiempo que tardan en ensamblar un camión.
Los transportistas ya han perdido muchos clientes ante la deficiencia del servicio, pues durante la pandemia, las empresas optaron por el transporte de personal y lograron aumentar de 4 mil a 7 mil 100 unidades, lo que les brinda mayor productividad.
Aunque han buscado audiencias con las autoridades para conocer planes o estrategias que mejoren el sistema, los transportistas no han encontrado eco.
El martes, la crisis en el transporte de Nuevo León se hizo más evidente, luego que la Asociación de Transporte Público de Pasajeros señalara que no habrá más unidades de transporte público circulando en el área metropolitana de Monterrey.
Esto ante una notificación del Instituto de Movilidad y una recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos, donde les pedían a los empresarios que a la brevedad pusieran en operación el 100 por ciento de las unidades para evitar aglomeraciones y cumplir con la medida de sana distancia.
Sin embargo, en respuesta, los integrantes de la asociación puntualizaron que el sistema se encuentra en un estado grave, incluso lo calificaron el peor en su historia y se declararon imposibilitados para cumplir con esa imposición ante la no disponibilidad de unidades necesarias para cumplir la demanda con la frecuencia del servicio requerida.
Los empresarios reconocen además que se ha visto afectada la calidad de vida de los usuarios, así como la productividad y competitividad de la ciudad.