Clau, Leti y Delfi La maestra Gómez informó de sus trabajos, sepa Dios cuáles sean, al frente de la SEP
La Secretaría de Educación Pública le pertenece ahora y en buena parte a la CNTE. Precisamente a ese grupo de rufianes que ha vandalizado institutos educativos y se ha opuesto a cualquier cambio que no traiga prebendas para sus docentes...
Estaban muy contentas. No faltaron ni el buen humor ni el optimismo, dos ingredientes imprescindibles para una reunión exitosa. Te deseo lo mejor, Leti. Gracias, Delfi. Jajajá, Jejejé. A su lado la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, toda ella sonrisas, rebosaba entusiasmo. Arriaga llegó tarde, pero nada le hace, para eso le asignaron sus padres semejante nombre de pila: Marx. Gil tiene para él la sospecha de que el joven Marx se veía ya en el escritorio de Vasconcelos. Usted no desespere, amigo Arriaga, ciencia, conciencia y paciencia. Éjele, que se le hace a Gilga que Marx andaba enmohinado.
A la extraña reunión, Gil no atina a saber de qué iba la cosa, asistieron la gobernadora de Guerrero, la simpática Evelyn Salgado; Carlos Merino, mandatario de Tabasco; María Luisa Albores, secretaria del Medio Ambiente; diputados, senadores, el líder nacional del SNTE, Alfonso Cepeda.
Gamés es corto de entendederas y de pocas luces, pero más claro ni el agua de horchata, se trataba de un acto de campaña de Claudia Sheinbaum. Que wey Gamés. Leti, Delfi, ¿nos tomamos una selfi (fi-fi)?, dijo la jefa de Gobierno. Y mucho jajajá, jejejé. La maestra Gómez informó de sus trabajos, sepa Dios cuáles sean, al frente de la SEP, y agradeció a dos grandes mujeres, Leticia Ramírez y Claudia Sheinbaum. La jefa de Gobierno, que rebosaba entusiasmo, ¿ya escribió esto Gil?, hizo una defensa de la educación pública y de las becas y nuevas preparatorias y universidades: “Es muy difícil que a un pueblo educado lo engañen corruptos y mentirosos”.
Le informan a Gilga que se han creado innumerables preparatorias y universidades. En ninguna de ellas se hacen exámenes neoliberales, usted entra y al cabo del rato ya hizo la prepa y luego se recibe de médico o lo que usted quiera. Por cierto, Gamés está a punto de recibirse como neurocirujano. Pasen a su consultorio, allí los atiende con gusto y los interviene de la testa a precios bajos el gran Gamés.
Secretaría viva
La maestra Gómez le dijo a la maestra Ramírez: “recibes una Secretaría viva, que tiene todavía muchos retos por dar atención, pero estamos en ese camino”. La candidata de Morena al gobierno del Estado de México hizo cuentas no digamos alegres, locas de felicidad: la basificación de 650 mil docentes, un incremento salarial de 7.5%, una inversión de 78 mil millones de pesos en becas en el programa “La escuela es nuestra”. Dice Gómez, escúchenla: “Y hoy quiero presumirles un referente a nivel internacional, tenemos alrededor de 150 países que han solicitado cómo se ha llevado a cabo (sic) este programa”. Gran cosa, ni lo duden, pero carambas, 150 países desean seguir el modelo educativo que Gómez no puso en marcha ni de casualidad, que cosa tan extraña. Tal vez todos somos unos ciegos, adversarios, conservadores. Oh, sí.
Militante de la CNTE
El gobierno ha guardado bajo siete llaves el pasado militante de Leticia Ramírez, líder de la sección 9 de la CNTE. Sí, ella militó en la Coordinadora. Puestas así las cosas, la Secretaría de Educación Pública le pertenece ahora y en buena parte a la CNTE. Precisamente a ese grupo de rufianes que han vandalizado institutos educativos, que han tomado las calles de la Ciudad de México ante la debilidad de los gobiernos capitalinos, que se han opuesto a cualquier cambio que no traiga prebendas para sus docentes. De allá viene Leticia Ramírez. Ahora mal sin bien, ella conoce al presidente desde hace más de veinte años, colaboradora de confianza que de educación sabe exactamente nada. O sea y la verdad (muletilla patrocinada por Morena en pleno): una desgracia más para la educación en México.
La maestra milagrosa
La débil y triste viejecilla que algunos periodistas defendieron durante años, reaparece con fuerza inusitada y atuendos juveniles: Elba Esther Gordillo. La maestra, que le sabe bien y bonito al balero del asunto educativo dice de la nueva secretaria de Educación en una entrevista de Salvador García Soto en su periódico El Universal: “A Leticia la recuerdo muy bien al inicio de la coordinadora. Ella, con otros, eran los cabecillas de la CNTE, tenían una oposición abierta a mejorar la educación. Es cierto que es maestra de escuela, pero yo la recuerdo en el sindicato, no en la academia; la recuerdo oponiéndose a la carrera magisterial, la recuerdo oponiéndose a una vida sindical que exigía democracia y salario para los trabajadores”.
Vean a Clau, Delfi y Leti en su reunión, ¿no hay en ese acto un acto de tremenda frivolidad?
Todo es muy raro caracho. Como diría Chamfort: “Vano quiere decir vacío; es tan ruin la vanidad que para afrentarla basta llamarla por su propio nombre”.