Con una jointventure, Unilever aumenta su apuesta en Birmania
Unilever logró una jointventure con un rival local de productos de consumo en Birmania como parte de una apuesta más grande en un país que se abre rápidamente a pesar de la caída del crecimiento económico y del valor de la moneda.
La unidad local del conglomerado anglo-holandés tiene el objetivo de triplicar las ventas en el país para 2020, en lo que un alto ejecutivo describió como una “fase de acaparamiento de tierras” para clientes en el mercado fronterizo de más de 50 millones de personas.
Unilever fue una de las primeras empresas occidentales en entrar a Birmania después de que se levantaron la mayoría de las sanciones internacionales en respuesta al inicio de una transición política que llevó al gobierno encabezado por Aung San Suu Kyi a ocupar el cargo el año pasado. Las empresas del sector de consumo, desde CocaCola hasta la japonesa Kirin se sintieron atraídas por la juventud del país, el alto crecimiento y la exposición limitada a las grandes marcas internacionales.
Pier Luigi Sigismondi, director de Unilever para el sudeste de Asia, dijo que el acuerdo con Europe & Asia Commercial Company (EAC) le dará un impulso a la capacidad de fabricación y fortalecerá la distribución en las enormes zonas rurales del país.
“Esta empresa conjunta nos permitirá duplicar nuestras ventas inmediatamente y nos logró un acuerdo con la local Europe & Asia Commercial Company dará el potencial para triplicar el tamaño de nuestra operación para llegar a 300 millones de euros (para la empresa conjunta) en los próximos tres años”, dijo.
Agregó que la empresa conjunta se va a beneficiar por las “avanzadas capacidades de fabricación” de su socio de Myanmar, y ello aumentará la presencia de Unilever en el país de una planta a tres.
“También tenemos el potencial de exportar desde Myanmar al sudeste de Asia”, dijo Sigismondi. “Esto es algo que vamos a explorar en los próximos años. El costo de mano de obra es bajo y tienen una sólida base de fabricación”.
Las compañías no dieron a conocer el tamaño de la inversión, pero Sigismondi dijo que Unilever tendrá una participación mayoritaria. Las operaciones anteriores de Unilever en Myanmar se nacionalizaron en 1965, durante los primeros años de lo que se convertiría en un régimen represivo de los generales de casi medio siglo.
Los mercados emergentes representan casi 60 por ciento de las ventas anuales de Unilever de más de 50 mil millones de euros, mientras que el sudeste asiático es la región de mayor crecimiento y la más rentable de Asia para la compañía, dijo Sigismondi.