Esplendores papales
Mediante 54 fotografías de gran formato, la muestra lleva al público a conocer las pinacotecas vaticanas y las grandes obras coleccionadas por los pontífices
l Museo Nacional de San Carlos muestra las galerías del Vaticano en la exposición de Laocoonteysushijos, pieza que representa la transición del arte renacentista de la pureza clásica al manierismo”, según explicó Giorgio Antei, curador de la muestra que se inauguró el jueves por la noche.
Las fotos de Listri se presentan en gran formato, lo que permite observar a detalle cada aspecto de la arquitectura y las piezas de arte que se encuentran en los espacios que retrató: el Museo Gregoriano Profano, la Biblioteca Apostólica, la Sala Redonda, el Gabinete de Laocoonte, la Sala de los Animales, la Escalera Simonetti, la Galería de las Esculturas, la Sala Principal, la Galería de los Candelabros y el Museo Pío Clementino. A muchos de estos lugares el público no tiene acceso.
Durante el recorrido de prensa el fotógrafo confesó que la única dificultad que tuvo al realizar su trabajo entre 2011 y 2016, fueron los trámites burocráticos. En ese periodo, explicó, se tomó más tiempo en visitar cada sala para estudiar los horarios en los que la iluminación favorecía el esplendor, pero al momento de hacer las tomas lo hacía de manera rápida.
A decir de Antei, un fotógrafo magistral no es el que hace poses larguísimas, sino el que ve, reconoce y saca la foto. Es así como Massimo, advierte el curador, concibe sus imágenes.
El lenguaje fotográfico de Listri es de “una absoluta limpidez, lo que permite que el ojo entre realmente en contacto con la arquitectura y los interiores; no es la visión fugaz turística sino una visión que ha sido calculada en beneficio del espectador. Sus fotografías se caracterizan por tener un punto de fuga a partir del cual se va organizando una mirada simétrica”.
Lo anterior, afi rma el curador, permite una visión nítida de los escenarios, por lo que se pueden apreciar cosas que, aun estando en el lugar, serían imposibles de ver.
Para Listri la fotografía siempre es reveladora, porque el ojo de cualquier forma está distraído por una cosa u otra. Al capturar una imagen, dice, hay dos momentos: “Uno en donde la mirada recoge la luz y la pone en una composición, y el segundo, que ocurre ya en la fotografía, en donde veo lo que intuí antes, pero también cosas que al momento de tomar la fotografía no vi. Eso solo está en las fotos”.
La amplia exposición se encuentra dividida en tres secciones: la primera está dedicada a la Biblioteca Apostólica Vaticana, con arquitectura de comienzos del siglo XVII, de Domenico Fontana; en la segunda parte se puede ver el Museo Pío Clementino, “el más importante patrimonio vaticano”, en donde se concentran esculturas clásicas, helenistas e imperiales, que van desde el siglo III antes de Cristo, hasta el quinto después de Cristo”.
La tercera sección está dedicada al Museo Gregoriano Profano, en donde Listri hace una interpretación de los bustos de mármol que se encuentran en él, un diálogo que el artista establece con la escultura, de la que no le interesa más que la expresión del rostro.
La exposición MassimoListri. Romapapal se puede visitar hasta el 27 de julio en el Museo Nacional de San Carlos, Puente de Alvarado 50, colonia Tabacalera.