Uso de tecnología en la docencia facilita enseñanza a estudiantes, explica maestra con 28 años de labor
Jaquelín Castelán Garduño, maestra de inglés con 28 años de experiencia, señaló que los docentes deben buscar nuevos métodos para que sus clases resulten fructíferas para los alumnos, por lo que las nuevas tecnologías son las herramientas perfectas para u
La enseñanza educativa no puede ser como hace 15 años, aseguró Jaquelín Castelán Garduño, maestra de inglés de la Escuela Secundaria Técnica Número 1, quien hoy aprovecha la tecnología para que estudiantes pongan más atención y la materia no sea una más en el currículo.
Este lunes se celebra el Día del Maestro, y MILENIO PUEBLA conoció la historia de la profesora con 28 años de experiencia. La docente explicó que no usar la tecnología para la educación es condenarse a no actualizarse, pues hoy los adolescentes ponen más atención si usan sus propias herramientas.
Con orgullo por poner en marcha una nueva estrategia educativa, Castelán Garduño reconoció que la transición del pizarrón, plumón y portafolio a las computadoras y aplicaciones no fue nada fácil, y si decidió hacerlo fue por la exigencia que ahora tienen los alumnos con sus maestros, ya que “si un docente no sale de su zona de confort y se capacita, difícilmente puede atraer la atención de sus grupos y con ello educarlos”.
“Yo vengo de una educación de pizarrón. Dejar el sistema que nosotros veníamos trabajando ha sido lo más difícil, pero reconfortante la evolución, porque vamos a la par de los jóvenes, tenemos clases más activas”, resaltó.
Pese a que involucrar día a día las nuevas tecnologías a su clase de inglés, tiene como consecuencia mayores gastos, pues cada diplomado de actualización requiere 6 mil 500 pesos, la profesora Jaqueline tiene la firme confianza de que su manera de educar hace la diferencia en los grupos de 40 jóvenes de segundo y tercer grado de secundaria, a quien imparte la clase.
Si bien señala que no todos cuentan con los recursos tecnológicos, los padres de familia han tomado un papel importante, pues apoyan en llevar a sus hijos a horas de internet, aunque otros más siguen en la línea de la educación antigua.
“El mismo sistema nos viene exigiendo que es importante evolucionar, buscar nuevas alternativas, y en muchas ocasiones los docentes tenemos miedo, pero los alumnos nos exigen ese cambio”. En 2012 se introduce nuevo plan de estudio En el año 2012 Castelán Garduño comenzó a involucrar el uso de la tecnología en sus aulas de clase, sin embargo, hasta 2015 este programa tomó fuerza, ya que los alumnos y la institución no tenían las herramientas suficientes para iniciar el reto al 100 por ciento.
“En mi clase de una hora, les pongo actividades de cuestionarios, donde cada uno tiene el reto de contestar, antes que otro, lo que hace que ellos estén más atentos”, señaló. La docente explicó que los más de 400 alumnos, distribuidos en 10 grupos, también han aprendido a usar aplicaciones como “Socrates”, web 2.0.
Castelán Garduño agregó que cada alumno tiene una cuenta con su contraseña, donde dispone diversas actividades, incluso ellos realizan su propio material didáctico. En los trabajos finales, la tarea ha sido realizar su propio programa de televisión y entrevistas a extranjeros en el Zócalo, en los cuales evalúa el desenvolvimiento de los adolescentes, que día a día crece.
“Trabajamos con Educaplay. Yo hago mi propio material didáctico, crucigramas, memoramas, y sin darse cuenta la hora se nos pasa rápido, pero ellos saben que estás tareas, que son más personalizada,s los ha ayudado a entender mejor el idioma”, consideró.
La maestra mencionó que los alumnos tienen una visión sobre los docentes como viejitos”, y en ocasiones también los propios maestros se sienten así, ya que las nuevas generaciones de compañeros poseen “el chip” tecnológico similar al de los jóvenes, por lo que resaltó la importancia que se deje atrás “la vieja escuela”.
Señaló que no todo fue malo respecto a la antigua forma de enseñanza, ya esta fue la base para emprender diversos métodos pedagógicos en los jóvenes; además, cada generación presenta sus diferencias, pues en su caso reconoció que no todos los alumnos emprenden el mismo entusiasmo cuando se trabaja con las aplicaciones.
En el tema, indicó que ante ello tiene un método en línea, donde a una hora deja las tareas y en ese momento los alumnos participan; mientras, otro esquema es dejar tarea y después nota cuáles estudiantes participan y los que no.
La profesora señaló que son más los docentes que apuestan por las nuevas tecnologías por iniciativa propia, al ver que los alumnos tienen más entusiasmo por aprender, y si los profesores no “se alinean a la onda” de ellos, se estancarán. Por último, señaló que pese a haber tomado cuatro diplomados, aún debe continuar actualizándose, ya que cada vez los programas tienen nuevas herramientas.
Los padres han tomado un papel importante, pues apoyan a los hijos con tecnologías