Macron el puente de Europa con Trump
En el marco de los festejos de la Revolución Francesa y el centenario del ingreso de los Estados Unidos a la Primera Guerra Mundial, Donald Tump, asistió a Francia para acompañar al presidente Emmanuel Macron en una serie de eventos.
Las coincidencias de la política y la historia, Woodrow Wilson un presidente aislacionista y que prometió primero los intereses de Estados Unidos había mantenido fuera de la guerra a su país por tres años, hasta que en 1917 ingresa con más de 2 millones de soldados y contribuye a la victoria. Cien años después otro presidente proteccionista parece que comienza a entender que debe tender puentes con Europa.
Durante la reunión del G20 los demás mandatarios se reservaban los encuentros con el presidente de los EEUU y es que su actuar es impredecible, tal y como le pasó a nuestro presidente Peña, cuando al término de la reunión le recordó a la prensa que México sería quien pagaría por el muro, cuando ese tema ya se había acordado no retomar en público.
Tal es el aislacionismo de Trump, que el mismo se está cerrando ante toda diplomacia, con Europa, América Latina, Asia y Rusia. Los temas son variados, seguridad, migración, tratados comerciales, terrorismo, cambio climático, pero todos los justifica con el bienestar de los contribuyentes de los Estados Unidos.
Tal vez, los asesores de Trump advirtieron que de continuar con esta política internacional podría afectar a EEUU, por lo que este viaje le sirvió a Trump para hacer migas con el que podría ser su interlocutor con Europa.
¿Por qué Macron? Porque después del Brexit, Inglaterra ya no pertenecerá al bloque económico de la Unión Europea y tendrá la oportunidad de generar acuerdos propios con EEUU; Alemania a través de su canciller Ángela Merkel ha dejado en claro que no podría entablar relaciones cálidas con Trump; mientras que Macron, tiene el respaldo de la UE y es el líder de la segunda potencia de Europa.
Si bien Trump veía con mejores ojos a Marine Le Pen en la campaña francesa, ya que compartía su agenda proteccionista y xenófoba, el triunfo de Macron parece no incomodarle y ha encontrado que será a través de él que podrá reinsertarse en el escenario global.
Sin embargo; la poca aceptación que tiene Trump tanto al interior como al exterior de su país, no la incrementará con el sólo hecho de presidir desfiles en Francia, tiene que dar muestras de buena fe, y esto tendría que ser a través de suscribir el acuerdo de París.
Uno de los principales críticos a la postura de Trump de no participar en el acuerdo, precisamente, fue Macron, quien invitó a científicos estadounidenses a ir a Francia, donde podrían seguir contribuyendo y “Hacer al mundo grande de nuevo” en alusión clara al slogan de la campaña de Trump.
Parece que Macron podrá dejar eso de lado por un momento y persuadir a Trump para abrirle la puerta a Europa y representar a la UE.