Desarrollo humano “multinivel”
Este entrenamiento de vida te permitirá recuperar la fuerza y el valor para enfrentar las adversidades. Todas las dinámicas son 100 por ciento vivenciales, ¡Supera tus creencias limitantes! ¡Atrévete, transfórmate!” La narrativa no es para nada compleja, de hecho es simple y vulgar. Sin embargo, crea un potente efecto de consumo y branding en miles de personas ávidas de experiencias de “desarrollo humano”. ¿Por qué deciden ingresar y se mantienen en estos grupos? Las elecciones humanas no son procesos algorítmicos, también pueden vincularse a decisiones que se apartan de las reglas de la racionalidad. Por otro lado, las constantes crisis económicas globales han develado el signo distintivo del capitalismo; la creación artificial de escasez y no la promoción de la mayor prosperidad posible.
En consonancia con Perlado (2015), algunos de estos grupos se constituyen bajo una dinámica y estructura sectaria por tres particularidades; 1) organización jerárquica y piramidal (multiniveles). Según Hassan (1998) la dinámica multinivel no es casual, se reclutan miembros para inicialmente descongelar (unfreezing), posteriormente cambiar (changing) y volver a congelar (refreezing), usando el Modelo BITE: Behavior control (control de la conducta), Information control (control de la información), Thought control (control del pensamiento) y Emotional control (control emocional), 2) la presencia de un coach o entrenador asume la figura de un gurú carismático, autoproclamado e incuestionable, 3) un ambiente escenográfico y psicodramático es diseñado explícitamente para el abuso psicológico gradual (cambio sutil y discreto de creencias y conductas), del cual las personas no son necesariamente conscientes o incluso lo justifican.
Según Singer y Lalich (1997), la persuasión coercitiva es un programa de modificación de conducta que genera la adopción involuntaria de una ideología. Así pues, no se trata de procedimientos de “lavado de cerebro”, sino de un sistema de influencias cognitivas y socio-emocionales ejercida a través del poder y la comunicación (Arendt, En Presby, 1992). Adicionalmente, Briñol et al (2004) indican que cuando la gente en experiencias grupales se afirma a sí misma se vuelve más vulnerable a la persuasión. La afirmación refuerza el autoconcepto disminuyendo la necesidad de defenderse y aumentando la apertura al cambio. Ojalá más Psicólogos decidan analizar los mecanismos de manipulación psicológica que subyacen al adoctrinamiento, al cambio del pensamiento y la posible radicalización (Trujillo, Ramírez y Alonso, 2009), pues todos nos merecemos, mucha más ciencia y menos fanatismos que consideran que sus ideas son las únicas verdaderas, por lo que buscan imponerlas, sin importarles causar daños a los otros.