Milenio Puebla

Impacto del estrés crónico en la salud (Parte I)

- FERNANDO FUENTES* ferfuentes­mty@hotmail.com *Premio Nacional de Periodismo 2008 y 2016. Premio México de Periodismo 2013. Director de la revista Medicina Científica.

En el año de 1886, en Inglaterra, se publicó la novela “El extraño caso del doctor Jekyll y el señor Hyde”, obra de Robert Louis Stevenson. La trama gira en torno al doctor Jekyll, un científico respetable que crea un brebaje cuyo efecto es transforma­r a una persona filántropa a misántropa. Cuando el doctor Jekyll bebe esta mezcla, se convierte en Edward Hyde, un criminal capaz de cualquier atrocidad. Desde el punto de vista de la psiquiatrí­a, a este cambio de personalid­ad se le llama trastorno “disociativ­o de la identidad”, explicó la doctora. Cindy R. Bandala, investigad­ora C del Instituto Nacional de Rehabilita­ción de la Secretaría de Salud.

En entrevista exclusiva, Cindy R. Bandala, miembro del Sistema Nacional de Investigad­ores (SNI) Nivel 1, citó esta novela porque considero que “el estrés como protagonis­ta de nuestra vida tiene ‘personalid­ades múltiples’, ya que dependiend­o el contexto se comporta como nuestro aliado o como el peor enemigo de nuestra salud. La psiconeuro­inmunologí­a es una disciplina que en las últimas décadas ha cobrado importanci­a en el ámbito de la salud, donde el contexto molecular del estrés desempeña un papel importante. La OMS (Organizaci­ón Mundial de la Salud) define al estrés como el conjunto de reacciones fisiológic­as que prepara al organismo para la acción. Sin embargo, cuando el estrés es constante, se generan respuestas bioquímica­s relacionad­as a diferentes patologías”.

“Los autores Lyle H. Miller y Alma Dell Smith en su libro ‘The Stress Solution’, clasifican al estrés patológico como agudo, agudo episódico y crónico. Los tres diferentes tipos de estrés se han relacionad­o con diversas patologías desde psico-emocionale­s, hasta enfermedad­es crónicas como diversos tipos de cáncer. La población de nuestro país está expuesta a diferentes factores que generan estrés crónico, siendo en las últimas décadas, la violencia social, como una constante en nuestra vida cotidiana”.

“En este sentido, la violencia de cualquier tipo, genera un estado de estrés (tanto oxidativo como neuroquími­co), en el cual, nuestro organismo libera sustancias de respuesta y alerta como cortisol, serotonina, norepinefr­ina y epinefrina, los cuales, al mantenerse de manera constante, a través de sus correspond­ientes ligandos, generan diversas respuestas biológicas relacionad­as a patologías crónico degenerati­vas”, afirmó Cindy R. Bandala, doctora en Investigac­ión en Medicina de la Escuela Superior de Medicina del Instituto Politécnic­o Nacional (IPN).

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